Hoy se ha firmado en el Ayuntamiento de Guadalajara el convenio de colaboración entre el Patronato Municipal de Cultura y el Seminario de Literatura Infantil y Juvenil para la celebración del Maratón de Cuentos, las sesiones de los Viernes de los Cuentos y para el Centro del Cuento.
Para este fin, el Patronato Municipal de Cultura del Ayuntamiento de Guadalajara destinará a lo largo del presente año la cantidad total de 74.000 euros, incluidos en el vigente presupuesto del Patronato.
El convenio firmado por el alcalde, Antonio Román, presidente a su vez del PMC, y por Blanca Calvo, en representación del citado Seminario, refuerza el vínculo que mantienen ambas instituciones para poner en valor uno de los eventos culturales de mayor proyección dentro y fuera de nuestro país, como es el Maratón de Cuentos.
Desde 1992, año en el que se celebró el primer Maratón de Cuentos en nuestra ciudad, hasta la fecha, el Patronato Municipal de Cultura del Ayuntamiento de Guadalajara es el patrocinador principal de esta actividad, convertida en referente de la narración oral a nivel internacional.
En el acto de firma del convenio ha participado además el teniente de alcalde y concejal de Cultura, Armengol.
UNA ESCULTURA EN HOMENAJE A LOS 25 AÑOS DEL MARATÓN DE LOS CUENTOS
El Maratón de los Cuentos celebra este año su 25 aniversario, motivo por el cual el Ayuntamiento de Guadalajara quiere rendirle un homenaje descubriendo, el viernes, 17 de junio, una escultura que se ubicará en la Plaza de Dávalos.
La escultura representa a uno de los cuentos tradicionales más populares: La bella durmiente. Su título es “Ariadna” y su autor es Rodrigo Romero Pérez. Representa a una niña sentada junto a su rueca, ataviada con ropa del siglo XVIII. El autor de la propuesta ha reflejado el nexo de unión entre dos mundos: por un lado, el mito de Ariadna, hilando la madeja que entregaría a Teseo para ayudarle a encontrar la salida del laberinto tras matar al Minotauro. Por el otro, la realidad que vivió Guadalajara con la apertura de la Real Fábrica de Paños, centro que influyó notablemente en la vida de la capital, convirtiéndose en la "madeja" que ayudaría a conseguir la recuperación económica y social de la ciudad.