Los textos tienen que ser propios, el tiempo límite de cada poema no debe exceder de tres minutos y no se permite el empleo de música, accesorios o disfraces. Es el Poetry Slam, un formato de concurso de poesía que pone tanto énfasis en la representación del poema como en el contenido. Y vale todo tipo de poesía, desde sonetos o rap hasta slam o hip hop. En prosa o verso. Es la poesía hablada, expresada solo con la voz y el cuerpo, directa, sin aditivos. La poesía escrita por y para el espectador. Que se entiende, que llega, seduce y conmueve. Que el público puede aplaudir, abuchear, vitorear o celebrar. Dentro de los actos programados para conmemorar el Mes de la Poesía en la biblioteca municipal de Valdeluz, este viernes habrá una sesión de Poetry Slam a cargo del poeta, músico y actor argentino Diego Mattarucco a partir de las seis y media de la tarde.
Formado en el Centro Cultural ‘San Martín’ de Buenos Aires y en el Estudio Teatro de Madrid, donde también asistió a clases de improvisación, danza y expresión corporal, en 2012 Diego Mattarucco llevó su primera propuesta escénica ‘¿Te harta este arte?’ a los escenarios. Ha resultado vencedor en más de 30 certámenes de Poetry Slam en Madrid, Barcelona, Zaragoza, Mallorca, Granada, Córdoba, Valencia, Toledo o Ciudad Real, y representó a la Comunidad de Madrid en los concursos nacionales de 2013 y 2014. Este polifacético artista también hace de monologuista, performer y como actor y locutor en cortometrajes. Ha actuado en numerosos espacios y festivales nacionales e internacionales, dirige la web cultural Somos Sumas e imparte talleres de poesía escénica en Madrid y Toledo.
El Ayuntamiento de Yebes ha recurrido a esta función de Poetry Slam para atraer, sobre todo, a los más jóvenes “a un género literario que suele alejarse de sus gustos culturales y en el que el público no es capaz de distinguir si está asistiendo a una sesión poética, una performance o un talent show”, en palabras de Juan Antonio Perojo, concejal de Cultura. Esta particular forma de comunicación nació hace 30 años en Chicago de la mano de un poeta aficionado que trabajaba en la construcción y hoy constituye una novedosa plataforma para la literatura: con textos polémicos, ritmo trepidante y la tensión de la competición. Solo se necesita un tema crítico-jocoso, unas cuantas rimas y un recitado dramatizado a micrófono abierto, todo ello amontonado en tres minutos. A diferencia de la simple lectura en voz alta o de la declamación, en el Poetry Slam se recurre a la interacción con el público, el múltiple uso del espacio-escenario y las posibilidades corporales y vocales del autor.
El protagonista de esta particular función poética se define a sí mismo como ‘un apasionado del mundo de la expresión”. En poco tiempo, Diego Mattarucco se ha convertido en un referente de arte nuevo, fresco y arriesgado. Hace apenas tres años escribió y dirigió ‘El poeta top’, su primera obra teatral, al mismo tiempo que representaba el montaje ‘¿Te atreves a quererme?’. En 2014 escribe ‘Ni hombres ni hembras, hambres’, un monólogo atípico que combina poesía, teatro y música en directo. Estrenado en formato café-teatro, ya va por su cuarta temporada. Ese mismo año publicaba el libro ‘Soliloquios de loco’ y cuenta con dos CD: ‘Oscuriclaros’ (2012) y ‘Musiloquios’ (2015). Ha indagado en el sentido que hay tras el sonido de la palabra y su interacción con el gesto, la música y el movimiento. Su obra está marcada por la figura retórica de la aliteración o cacofonía y sus malabarismos fonéticos se caracterizan por la riqueza estética y profundidad de contenido.
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