El compañero del Jordi independentista encarcelado pide que le cambien de celda porque..."es insorportable y está todo el dia dando la matraca con la independencia"
domingo 29 de octubre de 2017, 08:21h
Según revela Javier Chicote en ABC este 29 de octubre de 2017, la dirección de la cárcel de Soto del Real ha accedido a la petición del recluso, quien ha manifestado que el presidente de la Asamblea Nacional Catalana es «insoportable» porque está «todo el día dando la matraca con el tema del independentismo».
El preso de confianza que fue designado en Soto del Real para acompañar en la celda a Jordi Sánchez, presidente de la Asamblea Nacional Catalana, ha dicho basta. El reo ha pedido a la dirección del centro penitenciario el cambio de celda porque «no puede aguantar más» al líder de la ANC, en prisión preventiva por sedición desde el pasado 16 de octubre junto al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.
Según fuentes consultadas por ABC, la dirección de la cárcel de Soto del Real ha accedido a la petición del recluso, quien ha manifestado que el presidente de la Asamblea Nacional Catalana es «insoportable» porque está «todo el día dando la matraca con el tema del independentismo».
No ha podido más y ha solicitado ser sustituido por otro interno. Al margen del independentismo, el recluso ha alegado que Jordi Sánchez es «muy raro» en lo personal y que le hacía sentir «incómodo».
Como adelantó ABC, tras su paso por el módulo de ingresos, los Jordis fueron ubicados en dos módulos distintos, el I y el IV, ambos compartiendo celda con un recluso de confianza.
Por su comportamiento, ambos sospecharon antes de su declaración ante la juez Carmen Lamela que había bastantes posibilidades de ser enviados a prisión. Ninguno de los dos llevó teléfono móvil a la Audiencia, por lo que no tuvieron que entregarlo. Portaban una «pequeña maleta», pero suficiente para cambiarse de ropa. De hecho, rechazaron las prendas que el centro penitenciario ofrece a los reclusos. En cuanto al dinero, llevaban «muy poco» en los bolsillos. Los reclusos tienen que entregarlo antes de ingresar y luego pueden gastar en el economato un máximo de 80 euros mensuales que sus familias o abogados depositan en la cuenta del interno.