Un grupo de arqueólogos procedentes de diferentes universidades se encuentran realizando trabajos de excavaciones arqueológicas en el castillo de Molina de Aragón en la cuarta campaña de trabajo que se lleva a cabo en este conjunto fortificado de Molina donde está participando la Diputación de Guadalajara. Durante diez días se está tratando de averiguar la secuencia de ocupación en esta zona centrada en un contexto doméstico, probablemente una casa con sus muros, arquitectura y tipo de vida cotidiana de finales de la Edad Media, que está sirviendo para “empezar a intuir el principio de una secuencia mucho más grande que nos va a llevar dando pasos hacia el pasado”. Así lo ha explicado el investigador de la Universidad de Granada y director de estas excavaciones, Guillermo García-Contreras, quien ha detallado que “el interés se centra, sobre todo, en los cambios medioambientales, en cómo se explotaban los recursos naturales, qué tipo de consumo había, cómo se configuró el paisaje y qué relaciones tenían las comunidades humanas con la naturaleza de cada uno de los periodos de la historia”.
El presidente de la Diputación de Guadalajara, José Manuel Latre, se ha trasladado hasta el castillo de Molina para conocer de primera mano el transcurso de los trabajos e interesarse por los avances que se están produciendo gracias a esta nueva campaña que cuenta con el apoyo económico de la Institución Provincial. Latre ha explicado que en el lugar se encuentran trabajando personas de tres universidades: la de Granada, la de Reading, en Inglaterra, y la Universidad de Alcalá de Henares. En este sentido, Latre ha destacado el apoyo de la Diputación para seguir investigando sobre nuestro pasado en una zona tan singular como es el Geoparque de Molina de Aragón-Alto Tajo.
El alcalde de Molina de Aragón, también vicepresidente segundo y diputado delegado de Cultura, Jesús Herranz, presente durante la visita, incidió en “el interés de los molineses y de su ayuntamiento por saber qué pasó en el castillo de Molina” y por ello “se llevan sucediendo una serie de trabajos a los que se suma esta campaña que cuenta con la financiación de la Diputación que mantiene un convenio también con el Ayuntamiento de Molina y la Universidad de Alcalá”. “La UNESCO nos ha reconocido como el único Geoparque de toda Castilla-La Mancha y tenemos que profundizar en esta marca que hemos conseguido para poner de manifiesto de dónde venimos y saber a dónde queremos llegar”, apuntó Herranz.
Por su parte, el director de las excavaciones explicó que, para estos trabajos, se parte “de pequeños sondeos, pequeñas catas, que nos han permitido ir reconocimiento distintas fases de ocupación apoyándonos en estudios previos que ya Jesús Arenas y otros investigadores hicieron en el castillo hace más de una década. En una segunda fase hicimos una gran prospección geofísica con magnetómetro de todo el recinto que nos permitió reconocer toda las estructuras que estaban enterradas y, por último, este año gracias a ese apoyo económico por parte de la Diputación y el apoyo del Ayuntamiento y del Museo de Molina y el Geoparque empezamos a hacer los primeros sondeos para ir explorando qué tipo de ocupación había en todo este recinto fortificado que no era sino una villa de fronteras típica de la Edad Media, que es mucho más complejo que un castillo, porque es una auténtica ciudad con todo lo que ello supone de tipo de vivienda, tipo de gente que había aquí, tipo de espacios, etcétera”.
Durante la visita también estuvo presente el director de los Servicios Culturales de la Diputación, Plácido Ballesteros.