Los atascos que colapsan cada día los accesos a Guadalajara y que “hacen la vida imposible” a los guadalajareños y a quienes vienen a la ciudad, son ‘cosa’ de Page que, siempre que puede, perjudica a esta provincia con sus acciones u omisiones, “porque en Guadalajara las urnas no son favorables a los intereses socialistas”.
Así lo ha señalado una vez más el diputado del PP por Guadalajara, Lorenzo Robisco, quien junto al Puente Árabe ha querido denunciar los problemas de tráfico que en las últimas semanas se están produciendo a causa de unas obras que se están ejecutando a destiempo.
“En este punto se producen atascos a diario, desesperantes para los cientos de usuarios que cada día acuden, por ejemplo, a la estación a coger el tren… Si es que cuando consiguen llegar, hay alguno”, ha ironizado el parlamentario popular en relación a la reducción de frecuencias que está aplicando el Gobierno de Sánchez.
Además, Robisco se ha referido a la rehabilitación del Puente Árabe como una obra “chapucera”, apuntando en este sentido la escasez de presupuesto y también la sospecha en torno al estudio arqueológico, que ha sido solicitado por el Partido Popular sin que hasta la fecha se les haya facilitado. En este sentido, el diputado ha subrayado la importancia de la actuación en el Puente Árabe, una infraestructura de gran valor histórico y uno de los referentes de la ciudad de Guadalajara.
Robisco también ha responsabilizado el jefe del Ejecutivo regional de los importantes problemas de tráfico que se producen diariamente muy cerca del Puente Árabe, en la CM-101 (carretera de Fontanar), “que Page se niega a desdoblar, a pesar de que será una auténtica ratonera con la puesta en marcha de la Ciudad del Transporte”.
Todo esto se suma a los serios problemas en el otro acceso importante a la ciudad, el nudo de Cuatro Caminos, y también en la entrada y salida al Hospital Universitario de Guadalajara. Según Robisco, el presidente de Castilla-La Mancha tiene una responsabilidad directa, “por sus incumplimientos con los habitantes de esta ciudad y de esta provincia, en las que las inversiones prometidas sólo son papel mojado”.