Toledo, 14 de enero de 2025.- La Agencia del Agua de Castilla-La Mancha ha expresado su firme oposición al Plan Especial de Sequía para la demarcación del Segura, durante una reunión del Consejo del Agua celebrada en Murcia. La directora de la Agencia, Mercedes Echegaray, argumentó que el plan incluye recursos provenientes de la cuenca del Tajo, lo que contraviene el principio de unidad de cuenca establecido por la Directiva Marco del Agua.
Echegaray subrayó que cada cuenca hidrográfica debe gestionar sus propios recursos para abordar situaciones de sequía. “No puede ser que el Ministerio, a través de la Confederación del Segura, apruebe un documento que depende de recursos ajenos”, afirmó tras la reunión.
Desacuerdo con el Ministerio
La directora también criticó la prevalencia de la legislación sobre el trasvase en comparación con otras normativas. “Estos planes especiales de sequía tienen un rango menor y no consideran adecuadamente los intereses del territorio cedente”, enfatizó. Echegaray hizo un llamado al Ministerio y a la Dirección General del Agua para que se alineen en sus enfoques respecto a los planes hidrológicos.
“Lo que buscamos es que el trasvase sea considerado como un recurso más y no como una ley superior a todo”, añadió. Esta postura busca garantizar que las normativas sean coherentes y respeten los principios establecidos por la Directiva Marco del Agua.
Impacto en el futuro del Tajo
Echegaray destacó las contradicciones existentes en la gestión hídrica en España y cómo estas decisiones afectan negativamente a Castilla-La Mancha. “Se están utilizando recursos considerados excedentarios en otras demarcaciones, lo cual perjudica nuestro crecimiento”, advirtió.
El impacto se siente especialmente a lo largo del eje del Tajo, desde Sacedón hasta Talavera, donde podrían desarrollarse regadíos e industrias si se contara con suficientes recursos hídricos. “La falta de agua limita nuestro potencial de crecimiento”, concluyó Echegaray.
Demandas al Ministerio
Por último, Echegaray reiteró la urgencia de recibir información sobre los documentos técnicos relacionados con las reglas de explotación del río Tajo, que llevan más de un año retrasados. “Hasta ahora solo hemos recibido informes preceptivos necesarios, pero carecemos de planteamientos concretos”, finalizó, instando a una pronta evolución en este asunto crítico para la región.