Orgullo Blanco

El Real Madrid chocó, una y mil veces, con la muralla murciana. En nuestro campo se les gana y a la siguiente ronda. Este empate viene bien para hacer taquilla en el partido de vuelta en el Bernabéu.

Mi admirado Mou, sabedor de que en la casa blanca hay ganas de títulos, no escatimó en esfuerzos, ni dejó a sus estrellas en casa. Este es un título que no ganamos desde el año 93, por diversas circunstancias: mala suerte, dejadez, falta de motivación y estrecheces en el calendario provocadas por el rigor competitivo que acarrea la Liga, Champions y algún que otro partido de la Selección.

Para los madridistas el título de la Copa del Rey debe venir acompañado por otro mayor. Por sí solo suena a un cocido sin garbanzos, o sin carne. De unos años a esta parte se ha puesto de moda en Europa ganar el triplete. Mou ya lo ganó el año pasado con el Inter. Conoce el camino y la forma para reeditarlo con el Real Madrid. Cambiando de tema, “estos” del Barça quieren ganar el clásico del 28 de noviembre en los despachos y jugar el partido un lunes. Si hay que jugar se juega y si quieren de madrugada, también, pero no es así. Hay que tener un respeto por los millones de espectadores, ávidos de ver el clásico con sus amigos en casa, o en un bar… Los “Madrid-Barça” tienen que ser en sábado, como mucho en domingo. Es un acontecimiento con relevancia mundial, ni la Superbwoll, ni la NBA. ◆