GUADALAJARA

Más de 1.700 personas reclaman la supervivencia de la Sierra Norte

REDACCION | Miércoles 22 de octubre de 2014
Más de 1.700 personas se han manifestado este sábado por la mañana, en respuesta al llamamiento de la Plataforma en Defensa de la Sierra Norte de Guadalajara para reivindicar la supervivencia de esta comarca de la provincia, amenazada por la eliminación de servicios básicos, como la sanidad, la educación o el transporte. En un ambiente reivindicativo, pero también animado por el sonido de cencerros y música de dulzaineros, se han reunido al mediodía en la céntrica plaza de Santo Domingo antes de marchar hasta la sede de la Delegación de la Junta de Comunidades de Castilla- La Mancha, donde se ha leído un manifiesto con sus demandas. SIGUE

VEA AQUI EL MANIFIESTO "SALVEMOS LA SIERRA" QUE SE HA LEÍDO ANTE LA DELEGACION DE LA JUNTA DE COMUNIDADES DE CASTILLA LA MANCHA


"Desde la junta de la Plataforma Sierra Norte de Guadalajara hacemos una valoración muy positiva de la respuesta obtenida por parte de todos los pueblos de la sierra, la cual nos anima a seguir luchando por los derechos de la Sierra Norte de Guadalajara. Igualmente esperamos que la administración sea sensible a la respuesta de la sierra

Vecinos procedentes de la veintena de pueblos que forman parte de la Plataforma han protagonizado un recorrido encabezado por la pancarta “Salvemos nuestros pueblos, Salvemos la Sierra”. Además, se han podido ver otras reclamando el mantenimiento de los servicios de urgencias que el Gobierno regional pretende suprimir o pidiendo un trato igualitario para quienes viven en el medio rural.

En ellas se podía leer desde “SOS, Urgencias Hiendelaencina”, “Sin urgencias, sin autobús = ataúd” o “No te pongas enfermo de noche si no tienes coche”, hasta “Tributo, pero no computo”, “La Sierra paga, pero no recibe” y “No somos ciudadanas de tercera”, firmada esta por la Asociación de Mujeres Mineras, de Hiendelaencina.

El manifiesto leído por el periodista Raúl Conde, presidente de la Asociación Serranía de Guadalajara, contenía un llamamiento a la unidad para continuar levantando la voz desde “unos pueblos que ven amenazado su modo de vida en el presente, pero sobre todo ven amenazado su futuro”. Solo en los últimos meses, están asistiendo al cierre de los servicios de urgencias de Hiendelaencina y Tamajón; la desaparición de líneas de transporte público; supresión de empleos ligados al mundo rural, como los efectivos de lucha contra incendios, agentes de desarrollo local y orientadores de empleo; eliminación de inversiones en mejora de infraestructuras y comunicaciones, y para colmo, la amenaza directa de desaparición de ayuntamientos.

“La crisis existe, pero no son los pequeños municipios del medio rural sus causantes ni deben pagar por los excesos de otros. Las consecuencias no pueden recaer en quien menos fuerza o menos voces tenga para defenderse. Sin embargo, eso es lo que está pasando, y por eso estamos aquí”, señalaba el comunicado.

Después de unos años en los que la vida en estos pueblos ha experimentado una considerable mejoría, este esfuerzo colectivo puede irse a pique ahora para volver a la situación de la segunda mitad del siglo pasado, cuando sufrieron un fuerte despoblamiento y algunos de ellos llegaron aquedar totalmente vacíos.

Precisamente, para evitarlo se ha creado la Plataforma, “cuyo objetivo es unir a personas, colectivos, asociaciones e instituciones para defender el derecho a vivir en la Sierra Norte de una manera digna y para luchar contra el desmantelamiento de los servicios y la progresiva despoblación de esta comarca”, aseguraba el manifiesto. Además, subrayaba que nadie está excluido: “Ya somos demasiado pocos como para que alguien propicie la división. Este es un movimiento de ayuntamientos y de ciudadanos. Y caben todas las opciones políticas”.

Por último, los asistentes a la manifestación han reclamado a las instituciones, “principalmente al Gobierno Regional, pero también a la Diputación Provincial y al Estado”, que emprendan políticas para favorecer la supervivencia del mundo rural, “en especial de las zonas más desfavorecidas como la Sierra Norte y otras comarcas similares”, al tiempo que exigía la suspensión de los recortes “que más perjudican al medio rural”.

Junta Coordinadora
Plataforma Sierra Norte de Guadalajara
Guadalajara 10/11/12


MANIFESTACIÓN CONVOCADA POR LA PLATAFORMA SIERRA NORTE ¡¡¡SALVEMOS LA SIERRA!!!

COMUNICADO

Amigas y amigos, vecinos de todos los pueblos de la Sierra, gentes de Guadalajara o de cualquier otro lugar que habéis venido a acompañarnos en este acto de reivindicación.

En primer lugar quiero daros las gracias en nombre de la Plataforma Sierra Norte de Guadalajara, convocante de esta manifestación, por vuestra asistencia y por vuestro apoyo.

Hemos venido aquí a Guadalajara, ante la sede del Gobierno Regional a levantar la voz de la Sierra, la voz de unos pueblos que ven amenazado su modo de vida en el presente pero que sobre todo ven amenazado su futuro.

Por eso ha nacido esta Plataforma. Porque corremos el riesgo de que la situación de hace cincuenta años vuelva a repetirse. Entonces nuestros pueblos estuvieron a punto de
desaparecer. Algunos desaparecieron. Otros incluso llegaron a quedarse totalmente despoblados y se han recuperado con mucho esfuerzo.

Hoy esa amenaza se cierne otra vez sobre la Sierra.

Entonces vivíamos en una dictadura. Había pobreza, incomunicación, la gente era dócil ante los poderosos, y había miedo. El Estado lo tuvo fácil para vaciar nuestros pueblos con el señuelo de una vida mejor y un salario en las fábricas. Hoy, sin embargo, vivimos en democracia, somos ciudadanos y exigimos derechos. El pasado día 26 de octubre, en Galve de Sorbe, dimos un paso importante para luchar por nuestros derechos. La mayoría de ayuntamientos y asociaciones de esta Sierra nos comprometimos a defender juntos el derecho a vivir en los pueblos de una manera digna, a tratar de evitar su despoblación, a concienciar a la ciudadanía y a influir en las Instituciones para conseguirlo. Esta Plataforma nació ese
día con vocación de unidad y de permanencia: todos estamos convocados a esta tarea y todos somos bienvenidos.

Ningún ayuntamiento, asociación, persona o colectivo que quiera implicarse en la defensa de nuestros pueblos y en la mejora de sus condiciones de vida debe sentirse excluido.

Ya somos demasiado pocos como para que alguien pretenda la división.

Los pueblos de esta Sierra, y sus habitantes, tienen tras de sí una larga historia de pelear por la supervivencia, en condiciones nada fáciles. Cientos de años de trabajo en los
que se ha ido conformando el carácter de su gente y su forma de vida. Nuestros pueblos, como los conocemos hoy, son fruto del esfuerzo de muchas generaciones que nos
precedieron y a los que les debemos gratitud por su esfuerzo pero también valentía y arrojo para defender su legado.

Estamos convencidos de que nos deberíamos haber unido antes. Creemos que estaríamos mejor, nuestros pueblos tendrían mejores servicios y afrontaríamos la crisis y el
futuro desde una mejor posición. Pero es innegable que nuestros pueblos y la vida en los mismos han experimentado una notable mejoría durante los últimos treinta años, gracias a un gran esfuerzo colectivo.

Eso es lo que está en peligro. Todo ese esfuerzo puede irse a pique si no lo remediamos. La crisis existe, pero no son los pequeños municipios del medio rural sus causantes ni
deben pagar por los excesos de otros. Las consecuencias de la crisis no pueden recaer en quien menos fuerza o menos voces tenga para defenderse. Eso es sin embargo lo que
parece que está pasando, y por eso estamos aquí.

En los últimos meses, venimos sufriendo casi a diario el recorte de servicios y la desaparición de oportunidades de empleo y de vida en el mundo rural. Cada poco tiempo se anuncia una nueva medida que pone un poco más difícil la vida en los pueblos:
  • Cierre de escuelas.
  • Cierre de urgencias en los centros de salud.
  • Recortes en servicios sociales, en dependencia o en ayuda a domicilio.
  • Eliminación de líneas de transporte público.
  • Eliminación de empleos en la lucha contra incendios.
  • Abandono de inversión en infraestructuras, en comunicaciones y en promoción turística.
  • Cierre de pequeños ayuntamientos….


Todo esto preocupa seriamente a una población demasiado escasa y envejecida ya, que resiste como puede en el medio rural y amenaza la supervivencia de los propios pueblos, pudiendo desencadenar un proceso similar al que se vivió en los años 60 del siglo pasado, que se llevó por delante unos cuantos de nuestros pueblos. La Sierra de Guadalajara ya vivió entonces las consecuencias del abandono y la falta de oportunidades de futuro.

Y no estamos dispuestos a que vuelva a ocurrir. No queremos que se eche el cierre a la Sierra. Alcorlo, La Vereda, Matallana, Umbralejo, Jócar, Santotís, Robredarcas o Las Cabezadas deben ser el ejemplo de lo que no puede volver a ocurrir.

La desaparición no puede ser el futuro para nuestros pueblos. No podemos consentirlo.

Por eso ha llegado el momento de decir basta. La gota que ha colmado el vaso seguramente ha sido la decisión de quitar las urgencias en los centros de salud de Hiendelaencina y Tamajón. Pero hay mucho más: se trata de defender el derecho de los pueblos a existir y el de sus habitantes a vivir y a morir con dignidad en ellos.

La Sierra no es sólo un espacio natural importante en el que se producen los recursos y se proporciona ocio y esparcimiento para los habitantes de las ciudades. No puede ser sólo el lugar de donde llevarse agua de calidad a los grifos o donde acudir a cazar, coger setas, o hacer fotos. La Sierra y sus pueblos son el resultado del trabajo de muchas generaciones de gente sencilla y esforzada que han conservado el medio y nos han trasladado un modo de vida digno de conocer respetar y preservar. Y sus descendientes tenemos el derecho a continuar esa labor.

POR ESO HOY DESDE AQUÍ, NOS DIRIGIMOS:

· A los medios de comunicación, a la opinión pública y a la ciudadanía en general para advertir que esto que está ocurriendo puede convertir la provincia de Guadalajara en un gigantesco erial.

· A las Instituciones, principalmente a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, pero también a la Diputación Provincial, y al Estado, para que hagan políticas que ayuden al mundo rural y en especial a las zonas más desfavorecidas como nuestra Sierra Norte y otras comarcas similares. Y para que no quiten ni médicos, ni escuelas, ni autobuses, por ejemplo.

· A las fuerzas políticas, sindicatos y resto de fuerzas sociales para que adquieran conciencia de este problema y apoyen nuestras demandas.

· Y a los vecinos, descendientes, amigos y visitantes de todos los pueblos de esta Sierra, para decirles que esta Plataforma tiene sus puertas abiertas a la colaboración de todos.

HOY, AQUÍ EN GUADALAJARA, Y DE HOY EN ADELANTE, EN DONDE HAGA FALTA, QUEREMOS TRASLADAR:

· Que creemos en el futuro de nuestros pueblos, como parte esencial de un modelo de desarrollo sostenible.

· Que reivindicamos el derecho a residir en nuestros pueblos y al acceso a los servicios básicos desde ellos.

· Que recordamos la obligación de los poderes públicos de tomar medidas que favorezcan el asentamiento de población en el medio rural.

· Que nos oponemos frontalmente a los recortes en los servicios básicos. No vamos a dejar que quiten ni escuelas, ni médicos, ni autobuses.

· Que reivindicamos nuestra identidad social, cultural y administrativa. Y no queremos que quiten más ayuntamientos.

· Que resulta inmoral negar al mundo rural los servicios básicos, mientras se destinan inmensas cantidades de recursos a pagar los excesos de los bancos.

· Que trabajaremos unidos por conseguir oportunidades de desarrollo y condiciones de vida dignas para nuestros pueblos. Y que no estamos dispuestos a dar ni un paso atrás.

NUESTRO MUNDO, NUESTROS PUEBLOS, NUESTRA SIERRA, NO SON UNA HERENCIA QUE RECIBIMOS DE NUESTROS PADRES. SON UN PRÉSTAMO QUE HEMOS DE ENTREGAR A NUESTROS HIJOS. VIVA LA SIERRA NORTE!!!


JUNTA COORDINADORA
PLATAFORMA SIERRA NORTE DE GUADALAJARA
GUADALAJARA, 10 DE NOVIEMBRE DE 2012

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