El Gestesa lleva 10 derrotas consecutivas y ya se encuentra a 8 puntos de la salvación. Las posiciones en la clasificación cada vez están más definidas, lo que hace que la derrota ante el Playas sea casi determinante de cara a la pelea final por la permanencia.
El Gestesa Guadalajara progresa adecuadamente, sin embargo cada jornada que pasa disminuyen sus posibilidades de permanencia. La mejoría en el juego de los morados ya es un hecho, pero continúa sin transformarse en resultados positivos.
El Gestesa Guadalajara fue superior al Playas de Castellón en casi todo, menos en lo más importante, el acierto de cara a puerta. Por su parte los castellonenses se aprovecharon de la necesidad de los primeros, que buscaban con ansia su primera victoria. Ya desde el minuto 4, el conjunto visitante se imponía en el resultado, el tanto llegó demasiado pronto, rompiendo los esquemas del equipo de casa. Con el 0-1 en su bolsillo, las contras del Playas fueron muy peligrosas pudiendo haber ampliado las distancias en el marcador.
A falta de nueve minutos para el descanso, el Gestesa Guadalajara cometió su quinta falta de equipo, por lo que se arriesgaba a recibir lanzamientos desde los diez metros. Aguantó bastante, pero acabó llegando a fata de tres minutos. Su lanzador fue Cristian, aunque su disparo lo detuvo Dani, uno de los protagonistas del choque. El Gestesa también había probado en varias ocasiones a Iñaki, aunque sobre todo con tiros desde larga distancia. Moi y Blecua gozaron de alguna oportunidad para lograr el empate antes de que concluyera el primer periodo.
En la segunda mitad, el partido no varió en exceso. El Gestesa Guadalajara se iba poco a poco arriba, dominando la posesión y realizando transiciones largas, pero las contras del Playas de Castellón seguían siendo muy peligrosas. Aun con el 0-1, Kensuke tuvo una gran ocasión de haber conseguido la igualada, pero no tuvo fortuna. A falta de tres minutos para el final Carlos Sánchez apostó por el portero jugador en busca del empate, pero lo que se encontró fue con el 0-2 en el minuto 38. Kiko aprovechó un robo de balón de su equipo para tirar desde su propia área y marcar el gol de la sentencia.
A falta de 20 segundos, hubo un posible gol fantasma de Blecua que los árbitros no quisieron conceder, por lo que el restulado definitivo fue de 2-0.