La Universidad de Alcalá aprueba unos presupuestos austeros pero comprometidos con la investigación y la docencia

El Pleno del Consejo Social de la Universidad de Alcalá (UAH) ha aprobado los presupuestos elevados por el Consejo de Gobierno para el año 2013. Los presupuestos han sido elaborados en un contexto de grave recesión económica, caracterizado por los ajustes presupuestarios implementados por los Gobiernos Central y Autonómicos, los cambios en el modelo de financiación de la Educación Superior (con el aumento de las tasas universitarias y la disminución de la financiación pública de las universidades), y los recurrentes problemas de pagos de las Administraciones Públicas, que se trasladan a la Universidad. SIGUE



El presupuesto de 2013 es de 147,6 millones de euros, inferior en 15,8 millones al de 2012. El gasto desciende a una cantidad equiparable a la de hace ocho años, con niveles de financiación pública de 2006. Estas cuentas son, en una parte muy significativa, el resultado de las medidas del plan de ajuste iniciadas en 2012, que tiene todo su impacto en el presupuesto de 2013, aunque incorpora medidas de contención de gasto adicionales.

Las cuentas de 2013 dedicarán 11 millones de euros menos a gastos de estructura, incluidos gastos de personal, que se reducen en 3,8 millones de euros. Todas estas partidas (personal, formación y ayuda social) muestran un decrecimiento del 4,2%, y recogen en su mayoría acciones que ya fueron puestas en marcha en 2012 y que ahora tienen un reflejo en el presupuesto de 2013.

Gran parte de estos ahorros se han podido consignar en el presupuesto de 2013, gracias a la fusión de Centros y Departamentos, recientemente aprobada, que no sólo ha permitido reducir los gastos de personal vía cargos académicos y descargas docentes, sino también proponer unos gastos de estructura ligeramente más bajos. Adicionalmente, se registran ahorros derivados de la racionalización en la contratación, tanto de profesorado asociado como de personal de administración y servicios.

Los servicios generales y los principales suministros experimentan una reducción de 3,8 millones adicionales, recogiendo en parte los ahorros del ejercicio 2012 en las licitaciones efectuadas y la renegociación de un buen número de contratos. En estas partidas las subidas de coste han sido muy significativas, tanto por los precios de los servicios, como por el aumento del IVA.

En cuanto a la deuda financiera, el 2013 será el último año en que la Universidad ha de hacer frente a un compromiso de consolidación de deuda adquirido en 2003 por un valor de 47,6 millones de euros, y que ha supuesto una carga de intereses a lo largo de la vida del préstamo de más de 9 millones. Desde 2003 hasta la actualidad, la Universidad ha dedicado un volumen muy significativo de sus recursos propios al pago de esta deuda, que quedará saldada en este ejercicio de 2013.

Uno de los ajustes más importantes se produce en la partida de infraestructura y equipamiento (con cerca del 50% de reducción), que no contempla ninguna actuación de obra nueva a realizar durante el ejercicio de 2013. Las inversiones recibidas se dedicarán al mantenimiento de los edificios existentes y a acometer las actuaciones que técnicamente se juzguen más urgentes. En este ejercicio se recibe un 50% menos que en el anterior, y menos de un 5% de lo que en su momento establecía el Plan de Inversiones (2007-2011) firmado con la Comunidad de Madrid, y cuyo marco de financiación no se cumple desde 2008. El presupuesto de 2013 contempla la finalización de la única obra nueva que se está realizando, el Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación ubicado en los Cuarteles del Príncipe y Lepanto, para el que se dispone de financiación finalista.

Además de los 11 millones de euros que se reducen en gastos generales y de estructura, las políticas de los distintos Vicerrectorados y Departamentos Universitarios asumen un ajuste de 4,8 millones. En todos los Vicerrectorados y servicios se han reducido partidas y recortado considerablemente acciones de representación, viajes, locomoción, etc…Adicionalmente, la supresión de un Vicerrectorado se ha traducido en un reparto de competencias en otros cuatro, asumiendo el trabajo realizado hasta la fecha y formulando un diseño de las políticas más austero, con el consiguiente ahorro.

En síntesis, el presupuesto de la Universidad de Alcalá para 2013 continúa en la senda de la austeridad ya iniciada en ejercicios precedentes, intentando reducir al máximo sus gastos generales y estructurales de funcionamiento, para acomodarse a la reducción de la financiación impuesta y mantener así las políticas propias de una institución como la UAH, que requieren fondos para la docencia, la investigación y el compromiso con el desarrollo socioeconómico de su entorno.