Carta abierta a don Miguel Sebastián

Mi nombre es Jorge del Castillo y le escribo esta carta en clave de opinión personal, desvinculándola de mi cargo como secretario local de ideas y formación en el PSOE de Guadalajara y responsable local de Juventudes Socialistas de mi ciudad. Ante sus declaraciones de lo que es la “vieja izquierda”, le aseguro que es la gota que ha colmado el vaso. La militancia de este partido es variada y compleja. SIGUE

La salud de este hecho es envidiable, alejándonos en gran parte de dogmatismos jerárquicos y sectarismo cerril hacia un mandato. Pero el gran problema de esto es que parece ser que la idea más fácil de aplicar, insulsa e incluso inservible a la hora de cambiar nada es útil para llegar a puestos de relevancia. Incluso amistades o enchufes más allá de una ideología.

Un o una militante socialista, en mi opinión, debe ser continuamente crítico con lo que le rodea y le pasa por la cabeza; debe llevar la democracia allá donde vaya y, ante todo, debe tener las ideas directas hacia un objetivo de cambio y mejora para los que menos tenemos de manera colectiva y eficaz. El o la socialista auténtica no cambia por el viento o por los votos, sino que se muestra incorruptible, tanto ideológicamente como en los demás sentidos.

Se ha pronunciado sobre Rubalcaba y en mi caso no soy el mayor fan, ya sea porque don Alfredo lleve toda la vida en puestos de relevancia, el haber formado parte de gobiernos con ideologías no acordes a mi pensamiento socialista o simplemente por no sentirme representado por la mayoría de sus actos. Pero esto no impide para nada, como socialista, dar mi opinión sobre lo que está ocurriendo en el partido y alrededores.

Usted, don Miguel Sebastián, ha calificado de “vieja izquierda” el subir impuestos, siendo esto una medida que, de manera progresiva y coherente, afectaría a los más ricos, a los que su “nueva izquierda” parece querer representar.

Cuando la “vieja izquierda” de las calles pedimos sanidad y educación pública, rápidamente salta su “nueva izquierda” a pedir que la sanidad y educación privada también tienen que existir para quien se lo pueda pagar, representando exclusivamente a los más ricos y sus “libertades”, ya que son los únicos que pueden hacerlo.

Cuando la “vieja izquierda” de las calles pedimos república y acabar con la desigualdad básica de derechos civiles inherente a la monarquía, su “nueva izquierda” sale en defensa de la campechanía, inocencias familiares y reverencias feudales.

Cuando la “vieja izquierda” de las calles pedimos la dación en pago con carácter retroactivo, raudos y veloces surgís la “nueva izquierda” a cuidar de que a los bancos no se les moleste por el bien del sistema, a ver si va a caer y los ricos dejan de serlo.

Cuando la “vieja izquierda” pedimos acabar con los privilegios de la iglesia católica, su “nueva izquierda” protege a capa y sotana que siga siendo quien mande en los úteros de las mujeres de este país.

Y finalmente, cuando la “vieja izquierda” queremos un partido que realmente nos represente a los que menos tenemos, asalariados, parados y estudiantes, aparece su “nueva izquierda”, dejando en bandeja al Partido Popular que gobierne, alejando cualquier alternativa económica y social redistributiva y equitativa, así como desprestigiando al PSOE, a JSE; a sus siglas, a su historia y a sus fundadores socialistas.

Por lo tanto y ante todo esto, la “vieja izquierda” seguiremos en nuestro empeño de ser justos, equitativos y combatir todo lo que esté contra nuestros intereses. Esperemos que ese camino podamos hacerlo en el PSOE pero, en caso contrario, pediremos un cambio de siglas urgente ante el insulto que es que el Partido Socialista Obrero Español deje a los obreros y obreras a nuestra suerte para defender la injusticia, la inequidad, la desigualdad y la criminalidad de este sistema, mediante las actuaciones e ideas de la cómplice “nueva izquierda”, que habéis provocado claramente que perdamos las últimas elecciones por goleada, al dejar de lado toda esencia que nos hiciera socialistas, de izquierda o, simplemente, sirviendo a los intereses de los más ricos y desechando ser la alternativa que los que menos tenemos necesitamos..

Fdo.: Jorge del Castillo Morales