TOROS

El Ventorrillo, la exigencia de bravura

Juan Carlos Carreño, representante de la ganadería, con el mayoral Enrique Sánchez. / fotos: Campo bravo

Juan Carlos Carreño y Enrique Sánchez ~ Representante y Mayoral del Ventorrillo

Un toro bravo que de espectáculo, guste al público, lo demanden las empresas y lo quieran torear las figuras siempre en plazas de máxima categoría son las premisas del empresario Fidel San Román

REDACCION | Miércoles 22 de octubre de 2014
El empresario Fidel San Román desde que compró hace algo más de cinco años la ganadería y la finca del El Ventorrillo, partiendo de una buena simiente, creó un gran equipo.


Para el campo, se trajo como mayoral a Enrique Sánchez, de la ganadería de Guardiola. Como conocedor y para comercializar sus productos nombró representante a Juan Carlos Carreño, hombre de la casa Chopera. Hablamos con ellos dos en Robledo de los Osillos, la finca situada en Los Yébenes, en la provincia de Toledo, donde se encuentra esta ganadería.

Juan Carlos, el criar un toro de primera, para plazas de primera, buscando que todos los toros de la camada vayan destinados a ferias y plazas de máxima categoría condiciona el manejo y la selección.
Juan Carlos Condiciona la ganadería. Ya nos condiciona en los tentaderos. A nosotros, aunque una vaca sea extraordinaria, si no tiene tipo, no tiene hechuras y no sirve para que su producto sea de plaza de primera o de segunda alta, no nos vale de entrada. Seleccionamos mucho el tipo. Luego en el tentadero tiene que ser lo más. Hasta la exageración. Porque ni a Fidel, el dueño, ni a Enrique como hombre del campo, ni a mí que viviendo esto al cien por cien, comercializo los productos, nos sirve. Porque estamos convencidos de que las virtudes de la vaca se dividen por dos en el toro. Y sus defectos se multiplican. Por eso, de ochenta o noventa vacas que tentamos, estamos dejando el diez por ciento. Casi para reponer.

Enrique Sánchez Cada año tenemos en total menos vacas que cuando compramos.

JCC Seleccionamos prácticamente para reponer. Fidel no busca tener quince corridas de toros. Pero lo que tiene, lo quiere tener de máxima calidad, gordo, sano, limpio y perfecto.

Esa exigencia de lidiar todos los productos en plazas grandes puede tener ventajas. Pero también puede suponer un handicap.
JCC Trabajamos con un señor que es un gran profesional del mundo de los negocios. Como tal, a él le gustan las partidas grandes: las buenas. Y quiere que sus toros estén en Madrid, en Sevilla, en Pamplona, en Bilbao. No quiere criar el medio toro. Además de ganadero, Fidel es un grandísimo aficionado a los toros que se identifica con el público. Le gusta ver los toros como aficionado desde el tendido. Y le gusta el toro grande, sano y que se mueva.

Conseguir con regularidad un toro bravo, un toro que de espectáculo, que guste al público, lo demanden las empresas y lo quieran torear las figuras, lidiando siempre en plazas de máxima categoría, es un difícil equilibrio.
JCC Es ponerse el listón muy alto. Pero estamos los tres convencidos de que las figuras del toreo, que por eso son figuras, en las plazas de primera, donde está el dinero y la cotización para las de segunda y tercera, no le hacen ascos a una corrida seria y encastada.

Porque allí es donde necesitan ellos arreglar su año. En Sevilla, en Madrid o en Bilbao. Ellos no arreglan su temporada en Osuna, con todos mis respetos para esta plaza. Pero luego hay que ponerse delante y torearlo.

JCC Los grandes toreros son toreros muy buenos, muy capaces. Y en las plazas de primera no quieren el toro tonto y dormido. Además, saber que los toros que se van a anunciar son los que se van a lidiar es una garantía. Como lo es para las empresas y para el público. No quieren bailes de
corrales. El toro que es reseñado en el campo por la empresa es el que se van a encontrar en el sorteo.

Hablábamos de vuestra exigencia y de cómo influye en el manejo y la selección en la ganadería. Pero ese toro tan rematado, con cara y con esas culatas y esos pechos tan poderosos, supone un difícil reto para los toreros. El Ventorrillo no está considerada como una ganadería dura, pero sí es una de las más fuertes para los toreros. Además de aspectos morfológicos, ¿que otros criterios seguís en la selección?
ES Bravura y nobleza. Dentro del encaste Juan Pedro puro es una de las ganaderías catalogadas como fuertes, sí. Pero es un toro bravo, noble, con fijeza y movilidad: el que permite hacer el toreo de verdad. Tienen buenos pitones, claro. Al nivel de lo que se exige en las plazas grandes. Pero no caras destartaladas, sino muy bien hechas. Es algo que también estamos cuidando mucho.

CC Con todo lo que estamos hablando, en los últimos cuatro años no se recuerda que un toro del Ventorrillo le haya roto la taleguilla a un torero. Nuestros toros no han levantado los pies del suelo a ningún torero esta temporada. Ni el año pasado. Y estamos hablando de un toro muy serio, sí. Pero también de un toro que ha proporcionado triunfos muy importantes en todo este tiempo. En plazas de primera.

El de El Juli este año en Sevilla ha sido uno de ellos.
JCC Es la primera vez que logra abrir la Puerta del Príncipe en Sevilla. Y a Talavante también le han salido toros extraordinarios esta temporada. Hace ya dos años, en el año 2009, le cortó las dos orejas a un toro en Sevilla. El Cid ha triunfado con lo nuestro.

ES El toro de la ganadería de El Ventorrillo tiene, además, una gran e importante virtud para los toreros. El bueno lo ven enseguida. Y el malo también. Con lo que no tienen que andar demostrando al público que los culpables no son ellos. Para lo bueno y para lo malo, el toro siempre se pone de parte del torero. Del que vale, claro.

El Ventorrillo es una ganadería situada en la élite más alta y la torean las figuras en las plazas más importantes. Un hecho que hay que tener en cuenta y no desdeñar a la hora de valorar esta vacada en su conjunto. Por un lado, en esas plazas es mucho más difícil puntuar. Por otro, la solvencia de los grandes toreros es una garantía.

La ganadería de El Ventorrillo ha lidiado grandes toros en el año que acaba de acabar, en 2010. En plazas tan importantes como Madrid, Sevilla, Bilbao, Valladolid o Albacete. Y este año 2011 volverá a estar presente en las ferias de mayor tronío.

El reto que supone para las figuras del toreo es también un gran aliciente para los aficionados entendidos en el espectáculo de ver toreo un toro bravo.

Texto: Carlos Arévalo Nonclercq