Los datos de la vendimia de la región están siendo excelentes.
Lo que supone un incremento respecto al año anterior de un 30%
REDACCION | Miércoles 22 de octubre de 2014
La vendimia comenzaba en Castilla-La Mancha una semana después de lo previsto, a finales del mes de agosto. Las temperaturas del verano han acompañado para que la calidad de la uva sea la adecuada, con noches frescas, lo que ha permitido una maduración final basada en el equilibrio. Además, no han sufrido las enfermedades de otros años.
El aumento de producción respecto al año pasado se encuentra en el 30% –un 10% por encima de un año normal–, lo que coloca a la región a la cabeza de todo el conjunto nacional en incremento. La mayor producción que hay en Castilla-La Mancha es de airén y macabeo, mientras que en la producción boval se preveía una pérdida de cosecha que podría situarse en torno a un 40 por ciento debido a la marchitez fisiológica. SIGUE
Respecto al precio por la uva, se espera que sea razonable pese a su previsible bajada ante los incrementos en la producción. En concreto se manejan precios en torno a los 0,30 euros por el kilo de blanca y los 0,39 por el de tinta.
Por otro lado, muchas bodegas afrontan un año más la vendimia nocturna de manera que la uva pueda llegar a la bodega a la temperatura óptima de entre 10 y 15º C. A menor temperatura, menor oxidación y mayor protección de los compuestos aromáticos de la uva.
Con todo ello, las estimaciones de cosecha para esta campaña en Castilla-La Mancha hablan de 22,8 millones de hectolitros de vino y mosto.
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