Tribuna Abierta.-
Miércoles 22 de octubre de 2014
Las reflexiones que voy a articular en el presente texto, basadas en el modelo de Actividad Física y Deporte de Castilla-La Mancha, tratan de establecer las similitudes entre las acciones de nuestra Región y las directrices europeas que instan a los gobiernos a impulsar entre sus políticas el papel social del deporte, su dimensión económica y la promoción de planes y programas que contribuyan a mejorar la salud de la población a través de la actividad física y el deporte. SIGUE
Existen numerosas recomendaciones del Consejo Europeo sobre la función europea del deporte como medio de promover la educación, la salud, el desarrollo y la paz. Desde dichas directrices nos instan a los responsables de las distintas administraciones a realizar un esfuerzo constante e inteligente para disponer de planes y programas que faciliten el desarrollo social a través de la promoción de la actividad física al considerarla beneficiosa para la sociedad desde distintos sectores.
Entre las directrices de la Unión Europea con más vinculación a la política del Gobierno de Castilla-La Mancha destacan las que estableció en el año 2008, orientadas a fomentar políticas de promoción de la actividad física para mejorar la calidad de vida de las personas mejorando su estado de salud.
Otras de las recomendaciones más recientes de la Unión Europea, y vinculadas a dichas políticas, son las del 26 de noviembre de 2013 que se incluyen dentro del marco estratégico común sobre el “Proceso de reflexión en torno a unos sistemas sanitarios modernos, adecuados y sostenibles” para el impulso sostenible de servicios sanitarios y desarrollo con fondos estructurales de la UE 2014-2020, en las que se definen los objetivos temáticos a los que la financiación de la política de cohesión debería dar prioridad.
Dentro de dichos objetivos se encuentran directamente relacionadas con la política del Gobierno Regional algunas cuestiones como las siguientes: el “desarrollo de servicios relacionados con el envejecimiento de la población, la atención y la salud”, el “transporte sostenible, desarrollo de carriles de bicicleta y peatonales, considerando que todo ello afecta a la salud” o “…la aplicación de reformas para mejorar la relación coste/eficacia y la adecuación de los servicios sanitarios; (…) incluyendo la promoción y el fomento de estilos de vida saludables para hacer frente a los factores de riesgo para la salud como la inactividad física, el tabaquismo y los hábitos de consumo de alcohol perjudiciales”.
Asimismo, otra de las líneas en las que establece directrices el Parlamento Europeo (2007) es la que señala que se ha de trabajar para conseguir, al menos, las 3 horas de Educación Física a la semana en toda la educación obligatoria y, en función del estudio de las tendencias que se observen, abogar por las 5 horas a la semana. Una línea que se ve reforzada con el Informe “Un nuevo concepto de educación” de la Unión Europea (abril, 2013), en el que se reconoce su papel para contribuir de una manera eficaz al logro de los objetivos fijados en la Estrategia Europa 2020. En dicho informe se vuelve a subrayar la función social y educativa del deporte y su papel en la sociedad como factor importante para mejorar el bienestar físico de las personas, aumentando su calidad de vida y fomentando la integración armoniosa de la sociedad mediante la promoción de valores como la tolerancia, el respeto o la cooperación.
En este escenario, ante las evidencias que prueban que la principal intervención es a través de los programas de actividad física y deporte, la UE ha puesto como objetivo la promoción y el fomento de estilos de vida activos y saludables.
A ello debemos añadir que los progresivos cambios en los estilos de vida de nuestra sociedad han conducido a que la población presente unos índices de exceso de peso, cada vez más elevados, y con ello aparecen los problemas de salud (enfermedades cardiovasculares, fragilidad, cáncer, diabetes mellitus tipo 2, obesidad, etc.). Estos cambios afectan de manera más notable a la población infantil y a las personas mayores.
Si el escenario se centra en nuestra Región la realidad es muy preocupante. En Castilla-La Mancha, casi 1 de cada 2 escolares, entre 6 y 10 años, tiene problemas de sobrepeso u obesidad (Aladino, 2011). Esta situación, sumada a la del resto de Comunidades Autónomas, ha situado a España por delante de EEUU en obesidad infantil (Pronaf, 2011) y ha provocado que algunos autores presenten una hipótesis en la que la población infantil y adolescente actual pudiera ser la primera generación en ver reducida su esperanza de vida y el deterioro de la calidad de la misma por esta causa, al aparecer enfermedades a edades más tempranas que en generaciones anteriores.
Además, en Europa se espera un progresivo envejecimiento de la población, que implicará que dentro 10 años el grupo poblacional de más crecimiento sea el de personas de 80 años.
En el año 2022 se registrará un aumento de un 9,3% en la población mayor de 65 años de Castilla-La Mancha y en 2013 la tasa de sobre-envejecimiento será del 20,2% frente al 17,5% de la media de España.
Se sabe que con la edad aumentan los problemas de salud, especialmente a partir de los 55 años, llegando a una media de 5,7 problemas crónicos por persona en los mayores de 85 años.
Todo esto se traducirá en un mayor consumo de recursos sociosanitarios, constituyendo estos cambios y sus consecuencias un grave problema de futuro para la calidad de vida de los ciudadanos y un reto para las administraciones. La mayoría de las investigaciones y recomendaciones sugieren a los distintos gobiernos y comunidades que deben asumir esta responsabilidad diseñando estrategias para solucionar de manera práctica el problema.
En este sentido, el esfuerzo coordinado por parte del Gobierno de Castilla-La Mancha se basa en situar la actividad física y el deporte en la agenda del progreso Regional, con una proyección nacional y europea, aprovechando sus ventajas en todo momento. La estrategia de intervención se basa en promocionar la actividad física orientada hacia la salud.
Entendiendo ésta como la respuesta más eficiente para minimizar los efectos que sobre el sistema de salud tiene el actual estilo de vida y el envejecimiento poblacional.
Nuestra Comunidad dispone de una estrategia de actuación con la que se trata de promover un cambio de modelo en el estilo de vida de la población. Dicha estrategia se desarrolla a través del Plan Castilla-La Mancha +ACTIVA. Es un Plan de Acción Global que tiene como objetivo el fomento de estilos de vida activos y saludables en la población castellano-manchega, para todas las edades, con un especial énfasis en el colectivo escolar.
Una estrategia de intervención con una perspectiva transversal e interinstitucional que aúna las actuaciones de diferentes consejerías del Gobierno Regional: Educación, Cultura y Deportes, Sanidad y Asuntos Sociales, Agricultura, Empleo y Economía y Fomento, con el fin de sumar esfuerzos comunes para optimizar al máximo los recursos disponibles y lograr el mayor impacto posible en la población a través de las diferentes áreas que son competencia de las mencionadas consejerías.
Dicho plan de acción fue aprobado en Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha el 13 de diciembre de 2012 y a él se han ido sumando distintas administraciones y entidades (las cinco Diputaciones Provinciales, la Federación de Municipios y Provincias de Castilla-La Mancha, etc.) con el fin de promover y desarrollar estilos de vida activos y saludables para todas las edades. Además, su alcance está en consonancia con el “HORIZONTE 2020” para hacerlo coincidir con las políticas de la Unión Europea.
En el Gobierno Regional no sólo sabemos hacia dónde queremos ir, sino que además tenemos un plan de acción conjunto para llegar hasta allí. Por poner un ejemplo, entre las distintas acciones llevadas a cabo en el Plan Castilla-La Mancha +ACTIVA, destaca la apuesta de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes por la actividad física y el deporte entendidos siempre como herramientas educativas de primer orden que estimulan aprendizajes abiertos y flexibles, y son elementos muy apropiados para establecer pasarelas entre el aprendizaje formal y el aprendizaje no formal proporcionando la participación comprometida y activa de la comunidad local. En este sentido los centros escolares se han situado como referentes en la promoción de estilos de vida activos y saludables a través de una convocatoria de ayudas en las que el papel de los docentes, como coordinadores de dichos proyectos, es determinante.
El Plan Castilla-La Mancha +ACTIVA puede contribuir de forma positiva al crecimiento Regional, a la empleabilidad de los ciudadanos y la cohesión social mientras limita el gasto sanitario, además de facilitar un escenario de cohesión y de convivencia que permita afrontar de una manera responsable nuevos retos para el futuro, compartiendo ilusiones y aunando esfuerzos.
En síntesis, entendemos que la coordinación de las políticas, los programas y su aplicación en esta línea favorecen cambios en el comportamiento de la población y ofrecen beneficios sobre la sostenibilidad económica del sistema sanitario, además de múltiples beneficios sociales para la población de una manera prolongada.
Asimismo, el Plan Castilla-La Mancha +ACTIVA supone una propuesta para dar respuesta a la realidad actual atendiendo a los cambios que se generan con la práctica de la actividad física y el deporte y que obligan a los distintos agentes del sistema deportivo a adaptarse de manera permanente a ellos. Supone un marco para la acción claro y definido para las personas, las entidades públicas y privadas y la sociedad castellano-manchega en su conjunto, con el que se atiende y se da respuesta a las directrices europeas.
Juan Carlos Martín Martínez.- Responsable de Depote del Comité Provincial del PP en Guadalajaara
“No hay vocación más noble ni responsabilidad mayor que la de facilitar los medios a hombres, mujeres y niños en las ciudades y pueblos de todo el mundo para que puedan vivir mejor.” Kofi A. Annan
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