OPINIÓN

POBRES PERO ORGULLOSOS

Lord Charles Albert

Lord Charles Albert | Miércoles 22 de octubre de 2014
Pobres pero orgullosos eran los hidalgos de la sociedad española del siglo XVII. Eran los hijosdalgos. Y se estipulaba que el 10% de los habitantes de la Castilla de la época pertenecía a esta clase, hidalgos venidos a menos, pero que sacaban pecho a las primeras de cambio. Una de las muestras de su orgullo era que, aunque en muchas ocasiones no tenían ni para comer, salían a la calle con un palillo de dientes en la boca para decirle a todo el mundo, que acababan de comer opíparamente. Se trataba de un engaño conocido por todos, hasta el extremo de que al palillo en cuestión, se le llegó a llamar 'falso testimonio'. Una cosa similar se nos relata en el El Lazarillo de Tormes. La preocupación por la apariencia era tal , que los caballeros sin posibles, se ponían migas de pan en la barba para disimular una comilona inexistente. Mucho ha llovido y mucho agua ha pasado debajo del puente, pero el español actual no dista mucho del del siglo XVII.


Corrían los mediados de los setenta y tenía yo unos vecinos de los llamados de escalera, QUE Cuando se aproximaba Navidades, Semana Santa o el Verano, se encargaban de anunciar a todo el vecindario QUE SE IBAN DE VACACIONES, nada más lejos de la realidad. Lo que hacían era quedarse encerrados en casa, bajar las persianas, no hacer ruido, y esperar a que pasasen los SIETE DIAS de sus famosas VACACIONES.

15 MILLONES DE DESPLAZAMIENTOS se producirán estas Semana SANTA en España. 530.000 harán lo propio en Guadalajara, pero no nos engañemos, y echemos un vistazo a las cifras. La EPA apunta que ya hay cerca de 5 millones de parados, a diario están cerrando una media de 450 empresas, se ha destruido el 14% del tejido empresarial, el conjunto global de los trabajadores sufre los mayores recortes sociales y laborales de la historia, la jubilación se eleva a los 67 años, los precios sufren una escalada imparable y los impuestos alcanzan máximos históricos. La situación sería como para seguir los pasos de Groucho Marx y entonar el “ que paren España que me bajo”.

Pero todavía hay quienes creen que no hay tal crisis o que ya hay brotes verdes. Seguro que no es la primera vez que escucha lo de “pues habrá crisis, pero las grandes superficies están llenas”, o a quienes dicen refunfuñando “no habrá tanta crisis cuando se han llenado los hoteles esta Semana Santa”.

No nos engañemos. Las superficies comerciales están abarrotadas pero los comercios cierran. “Mucha visita y poca compra” –se quejan los comerciantes-. Los bares se llenan ,pero los hosteleros despiden camareros, los ingresos caen más de un 25%, “hay quienes piden una coca-cola o un café y se tiran toda la tarde con la misma consumición, no se vende ni una ración”. Los hoteles están repletos estos días de Semana Santa pero muchos españoles han decidido irse al pueblo. Las agencias de viaje tiene la clave :“Los hoteles se llenan de alemanes que empiezan a ver la luz y salir de la crisis y de turistas que huyen de la zona conflictiva del norte de África y se vienen a España”.

El último informe sobre el ahorro de los españoles dice que más del 70% reconoce que si tuviese dinero lo destinaría a ahorrar y que, ahora mismo, sólo gasta en productos básicos y de primera necesidad. Hasta un 31% reconoce haberse pasado a comprar marcas blancas ante las dificultades económicas. La mayoría ha pospuesto o dejado para mejor ocasión servicios como el dentista o el taller mecánico y otro dato significativo, hasta un 20% ha dejado de celebrar su cumpleaños. Sólo hay algo a lo que no se renuncia ,salvo necesidad extrema, las vacaciones, para el 40% son SAGRADAS y se harán juegos malabares con los números antes que renunciar a ellas. Siempre nos quedará el pueblo… con nuestros abuelos que están “encantados” de ver a sus nietos, y de los tomates tan buenos que tienen allí..sobre todo gratis…
Vacaciones, vacaciones, no son. Pero la solución del PUEBLO, nos recuerda a las famosas migas que se echaba el hijodalgo a la barba , para aparentar algo que no tenía
Seguimos siendo hidalgos y castellanos, pobres, sí, pero sobre todo orgullosos. No hemos cambiado tanto, por mucho agua que haya pasado por el puente y que vaya a caer para disgusto de nuestras cofradías.

Muchas gracias por haber tenido la paciencia y amabilidad de llegar hasta aquí y leerme. Que disfruten, dentro de lo posible de esta Semana Santa de 2011.

Un saludo
Fdo: Lord Charles Albert