INFORMACION

Buenos días En estos días muchos medios extranjeros se han extrañado por las protestas ocurridas dado que España es un país democrático. No les falta razón al hacer esta afirmación. Gracias a eso, a que somos un país democrático podemos protestar, gritar y reivindicar lo que no nos gusta sin ser apaleados como en otros países. Esto no quita que nos hayamos olvidado que la democracia no es un sistema que se implanta y ya está. Es un sistema en el que se debe luchar trabajar y mejorar entre todos. Y en estos años tanto políticos como ciudadanos hemos olvidado esto. El movimiento 15M hizo salir el domingo a la calle a muchísima gente, pero no sólo está la que salió.

Puedo dar fe de que hay personas que están de acuerdo con este movimiento y no pueden salir por su situación personal actual. Por lo tanto creo que se merece un respeto y cobertura que no está teniendo.Se está intentando valorar este movimiento electoralmente en vez de entrar al fondo del asunto que es lo que debería interesar. El por qué nos movemos, el motivo de la indignación, qué nos ha llevado a estar ahí.

Este domingo salió a la calle gente que vive una crisis en la que se le pide que se sometan a una austeridad, desde una posición de superioridad que no da ejemplo de lo que están demandando. Bajadas de sueldo, subidas de impuestos, despidos baratos, bajadas de pensiones y un largo etc. Gente que no llega a fin de mes, o que llega pero le preocupa que sus hijos en un futuro no puedan hacerlo. Gente que no está de acuerdo en cómo se está gestionando la crisis. Y sobre todo, gente pacífica, que sale a la calle con las manos en alto, gritando que no, que no nos representan. No nos representan porque no nos escuchan; porque los que elegimos (o no) en las urnas están sometidos a la voluntad de otros a los que NADIE ha votado.

En lugar de centrarse en esto, los medios magnifican la actitud violenta de unos pocos, que ni creen en el movimiento ni en nada. A esos pocos que siempre están en cualquier acto en que puedan desatar su violencia. Intentan desprestigiarnos metiéndonos a todos en ese saco. Y a 4, los convierten así en cientos. Y tratan de confundir, y lo consiguen. Pero no al nivel que desearían.

En prácticamente todas las celebraciones deportivas (fútbol sobre todo) se producen altercados y conatos de violencia callejera. Y no por ello se criminaliza a todos los aficionados; ¿por qué con nosotros sí se hace? ¿Realmente somos criminales por no querer una democracia sesgada e interesada?
Sé que no todos los medios han actuado igual, y desconozco en qué postura se encuentra quien está leyendo esto. Si es usted uno de los periodistas que ha tratado con rigor este movimiento, que los hay, mis más sinceras disculpas y muchas gracias por su labor.

Sea quien sea, gracias por su atención. Un saludo.

Fdo.: Antonia Borrego

P.D: No obstante sentimos sinceramente la violencia manifestada en algunos casos y condenamos cualquier tipo de agresión recordándoles que, a excepción de algún individuo aislado, el movimiento 15-M se fundamenta en la resistencia pacífica.