En un acto cultural que le puso el broche de oro al III Mercadillo del Libro de Segunda Mano organizado por el Ayuntamiento de la localidad alcarreña desde la Biblioteca Municipal
REDACCION | Martes 30 de junio de 2015
La Plaza Mayor de Fuentenovilla, con su imponente picota a un lado, y las iluminadas paredes de su iglesia parroquial al otro, acogió el recital poético basado en la obra del poeta Antonio Hernández que, de la mano de la Fundación Siglo Futuro y de la Diputación Provincial, llegó hasta la localidad alcarreña.
El acto le ponía el broche de oro al III Mercadillo del Libro de Segunda Mano, con el que Fuentenovilla había sacado la cultura a la calle, con el fin de destinar la recaudación de la iniciativa a la adquisición de nuevos fondos para la biblioteca Blas de Salcedo, que sin duda es el foco cultural principal del pueblo. Esta labor callada y constante fue ampliamente aplaudida por los tres protagonistas del acto, la profesora y escritora guadalajareña Carmen Guaita, el cantautuor Emilio José, y el escritor Antonio Hernández, “el más importante poeta español vivo”, valoraba la propia Guaita, que acaba de publicar una novela que se llama 'Jilgueros en la cabeza'.
El acto fue prologado por la alcaldesa de Fuentenovilla, Montserrat Rivas, quien se refirió a la calidad literaria y humana de Hernández. La regidora tuvo también unas palabras de agradecimiento para las personas que acercan la cultura a Fuentenovilla “no solo hoy, también a diario”, citando expresamente a José vicente Monge, bibliotecario, y a Pablo de la Torre, concejal de Cultura. También estuvo presente en el acto Pedro Sánchez Yebra, alcalde de Yebra y diputado provincial.
Nada más subir al escenario, se hizo evidente que Carmen Guaita es una ferviente admiradora de la obra de Antonio Hernández, “que ha ganado este año el Premio Nacional de Poesía, un galardón absolutamente merecido”. La profesora gaditana calificó de “inmenso honor” compartir con él una tarde de poesía y presentár al poeta al pueblo de Fuentenovilla. Correspondió a la docente introducir al público el libro con el que Hernández ganó el prermio, 'Nueva York antes de muerto'. Con su verbo musical y fluido, la “maestra”, como se definió a sí misma, calificó el texto como verdaderamente impactante. “Leí su último poema, me llegó al alma y tuve que empezar por el principio, en la que fue una lectura voraz y profunda”.
En la era del 2.0 y el 4G, Guaita situó la poesía en el lugar que, a su juicio, le corresponde. “Dice el filósofo Fernando Savater que lo que falta en esta época es belleza. Y la poesía es verdad y belleza. La poesía está. Está en los niños, en las escuelas, está en los libros, está en las historias y está en la gente, lo que hay que hacer es verla, apreciarla y conseguir que los responsables de la Cultura, como han demostrado hoy aquí los de Fuentenovilla, le den alas a los versos, que son una herramienta para vivir. Sin la cultura, el ser humano no llega a ser persona”, decía.
El propio poeta subió a continuación al escenario para recitar ante un público heterogéneo algunos poemas seleccionados de entre su obra y aquellos que más le han influido, siempre “sin enfatizar, porque el énfasis resulta demasiado histriónico”, pero con la verdad en su voz. Mientras recitaba, los vencejos coreaban sus versos, frenéticos de actividad, y las campanas del Ayuntamiento los subrayaban, dándoles así la importancia que la modestia del autor quería sólo dejar entrever.
Hernández recordó en su monólogo poético a algunos de los poetas y escritores más importantes de la lengua en castellano, como Jorge Luis Borges, cuyas conversaciones con él sirvieron al escritor de hilo conductor de su disertación, Antonio Machado, andaluz, como él, pero enamorado de Castilla, como él también, o Miguel Hernández, inolvidable poeta alicantino, que, curiosamente, comparte el nombre con su propio hijo, circunstancia a propósito de la cual el ponente hizo alguna divertida e ilustrativa chanza.
“Mis fuentes de inspiración son múltiples. Ahora se cumplen 50 años de la edición de mi libro 'El mar es una tarde con campanas' y a lo largo de toda mi trayectoria, debo decir que hay una serie de 'poetas preferentes', que han influido en mi forma de expresión. Por citar sólo algunos de los del siglo pasado, me referiré a Juan Ramón Jiménez, Antonio Machado, Luis Cernuda, Luis Rosales y Miguel Hernández”.
Emilio José cerró el recital con esa voz tan familiar suya, que conserva intacta. El cantautor cantó un poema de Antonio Hernández, al que puso música hace años, “en un disco con letras de poetas andaluces como Alberti, Luis Rosales o Rafael Montesinos”, y también algunos temas suyos como el inolvidable 'Soledad'. Sobre Hernández opinó que “Antonio es uno de los grandísimos escritores que tenemos y, aunque suene muy fuerte lo que voy a decir, lo reconocerán como merece cuando muera, porque es el Federico García Lorca de nuestros días”.
Noticias relacionadas