Acaban de iniciarse las obras de construcción de un nuevo arquetón para las conexiones de los colectores de las aguas residuales de Marchamalo y las del Polígono del Henares con el tramo de colector que arranca en una zona próxima al puente del río y que discurre hasta la planta depuradora de aguas residuales, en el barrio de La Chopera.
Entre otras labores se van a rectificar las cotas en el punto de encuentro y se eliminará el entronque actual, de 90 grados, por una nueva línea con un ángulo más suavizado.
El objetivo de los trabajos no es otro que el de evitar que se acumulen aguas, con las consiguientes molestias para los vecinos de la zona. El resultado de esta actuación “permitirá mejorar el flujo en el punto de entronque, eliminado las zonas de remanso de agua y disminuyendo la pérdida de carga”, explica Ángel García, concejal delegado de la gestión del agua.
Gracias a estas obras, “dejarán de depositarse arenas y al aumentar la velocidad disminuirá la cota de la lámina de agua, lo que contribuirá a aumentar la capacidad de desagüe del colector que recoge las aguas residuales y pluviales de la zona de la vertiente final de las calle Federico López y José de Juan, así como la recogida de aguas del colector de la calle José de Castro. Este último colector recoge un importante volumen de aguas pluviales procedentes de las calles Salvador Dalí y Francisco Aritio, explica el edil.
Esta actuación se enmarca dentro del Plan de Inversiones en obras de Infraestructura Hidráulica para la ciudad y sus pedanías auspiciado por la empresa Guadalagua en coordinación con el Ayuntamiento de Guadalajara. El presupuesto de este proyecto, que corre por cuenta de la citada adjudicataria del servicio de agua, es de 150.700 euros. No supone coste alguno para las arcas municipales.