La portavoz del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Carmen Riolobos, ha denunciado hoy la hipocresía de Page en relación con la reducción progresiva de la enseñanza concertada en Castilla-La Mancha.
En rueda de prensa, ha reprobado también el sectarismo de la consejera del ramo, que ayer en un alarde de autodefensa, en el Pleno de las Cortes regionales, dijo que la educación en Castilla-La Mancha solo tiene un color, que es el color rojo de los socialistas.
“La educación debe ser de calidad”, -ha defendido Riolobos-, pero el hecho de que la consejera de Page dijera ayer que debe ser “roja” es un acto de sectarismo.
Además, la dirigente popular ha lamentado la actuación de Page en relación con la reducción de la enseñanza concertada, que “es un ataque frontal a un derecho fundamental que es la libertad de elección de centro por parte de los padres y las familias para la educación de sus hijos”.
Riolobos ha denunciado la “notable hipocresía” de Page, porque firmó una cosa en el acuerdo PSOE-Podemos para los presupuestos de 2016 y ha intentado verbalmente decir lo contrario de lo firmado.
En este sentido, la portavoz popular ha calificado de “inaceptable” la agresividad con la que trató Page a un periodista por el simple hecho de preguntarle por este asunto, puesto que estaba intentando mentir y engañar a los oyentes diciendo lo contrario de lo que había firmado con Podemos.
De este modo ha manifestado que en la firma aparece que Page se quiere cargar progresivamente la educación concertada e ir sustituyéndola por centros públicos exclusivamente.
Según la portavoz popular, “este es un tema gravísimo, porque afecta a 130 centros de Castilla-La Mancha, pone en cuestión el hecho de que los padres de 55.000 alumnos puedan elegir el centro y afecta también a cerca de 4.000 profesores que, o bien son de centros concertados, o son cooperativistas que forman parte de las cooperativas de muchos de los centros concertados de Castilla-La Mancha”.
Además, -ha continuado- esta decisión “es una actuación eminentemente ideológica, porque desde el punto de vista económico una plaza concertada cuesta a la administración aproximadamente un 50% que la de enseñanza pública”, ha concluido Carmen Riolobos.