REDACCION | Miércoles 17 de febrero de 2016
Pepe “El Marismeño” rompe su silencio en Diez Minutos y confiesa: “a Carmen Ordóñez y a mí nos unió la droga”. También afirma que “Cayetano fue el único que se preocupó por su madre”, además de asegurar que “Fran vive de cara a la galería”.
Todos los detalles del bautizo de Ana, la hija de Kiko Rivera, así como la noticia de la próxima boda de Fernando Alonso y Lara Álvarez, que contraerán matrimonio en Dubái o Maldivas antes de que acabe el año, completan las noticias del corazón destacadas en portada.
Kiko Rivera, solo en el bautizo de su hija Ana
Nadie estará con Kiko Rivera en uno de los días más importantes del Dj,el bautizo de su hija Ana. Por lo menos de cara a la posible exclusiva: ni su madre, Isabel Pantoja, ni sus hermanos, Francisco y Cayetano, estarán con él. Este último iba a ser el padrino, pero finalmente ha declinado la invitación por cuestiones laborales.
Se van a perder un fiestorro para 120 personas en el hotel cortijo El Esparragal, el sitio elegido, según Diez Minutos, para celebrar el banquete.
En el caso de la cantante, serán motivos de ánimo los que la impidan aparecer ante los medios para apoyar a su hijo. Y eso que para entonces Pantoja ya será libre. Dice Diez Minutos que cuando le comunicó a su hijo que no asistiría, Kiko rompió a llorar.
Pepe 'el Marismeño' rompe su silencio
Diez Minutos trae las primeras palabras de Pepe el Marismeñoen mucho tiempo. El cantante habla de la relación que mantuvo con Carmen Ordóñez y se despacha con los hijos de la difunta.
El que fuera pareja de la fallecida Carmina Ordóñez, Pepe 'el Marismeño', José Luis Gómez, ha roto años de silencio en la revista 'Diez Minutos', y tras hacer más de dos décadas desde que se conocieron y 12 años del fallecimiento de una de las mujeres populares con más belleza y personalidad en nuestro país, que llegó a marcar una época en la crónica social española, el cantante reaparece para hablar de la relación que mantuvieron durante más de dos años, del consumo de drogas y también de la relación que ella tenía con sus hijos, Fran y Cayetano Rivera, y Julián Contreras.
José Luis Gómez, más conocido como Pepe el Marismeño, ha decidido hablar gratis y por primera vez para Diez Minutos de su etapa con Carmen Ordóñez, después de 13 años y de haberse recuperado completamente de todas sus adicciones. Lo hace ahora porque considera que es un buen momento para "hablar de corazón".
Es consciente de que cuando conoció a Carmina, con tan solo 20 años, "se vio inmerso en un mundo que no le pertenecía". No tiene reparos en reconocer que "cuando empezó su relación, ella ya era una persona muy enferma, que estaba mal" y que su entorno no le ayudaba en nada porque vivía "en un mundo de mentira y locura".
Años después de aquella vida loca y con Carmina en el recuerdo, 'El Marismeño' concede una entrevista valiente en la que narra sin censura muchos secretos que compartió con Carmina, una mujer veinticinco años mayor que él con la que disfrutó de unos unos años llenos de excesos
Dice Pepe que rompe su silencio porque hace trece años que se recuperó, y que ahora vive sus mejores momentos. Que conoció a Carmina en la peor etapa de su vida y que, aunque todo el mundo culpó a la Ordóñez de su drogadicción, la verdad es que él ya arrastraba ese problema. De hecho, confiesa que la droga los unió más. "Carmen no interesaba curada… Gente que trabaja ahora en televisión serían camareros si no fuera por ella".
De los hijos de Carmina dice que sólo Cayetano se preocupaba por ella, que Julián era demasiado pequeño, y que Fran vive "de cara a la galería".
La aparición junto a ese titular: «A Carmina y a mí nos unió la droga», ha sorprendido a muchos ya que no es la primera vez que el artista flamenco lo hace.
Como ya sucediera en años anteriores, nunca dudó en protagonizar portadas y hablar del pasado, aunque sin rencor, reconociendo que con Carmen consumió droga «durante mi relación con Carmina Ordóñez fue cuando peor estuve de salud», decía en pasadas entrevistas enfatizando que para ser más exactos en cuanto a salud se refería, tenía por nombre cocaína. Lo que sí hay que reconocer de Pepe es que ha sido de los pocos en reconocer que en la clínica donde se
El mensaje de Pepe «El Marismeño» tiene de positivo que se habla de forma clara sobre las drogas, que cuando se trataba no ingresaba por depresión, sino por adicción. José Luiz Gómez deja los titubeos para otros escenarios y siempre ha contado abierta y públicamente el infierno que supone caer en las redes de ese mundo. «Pero uno no se cura en quince días, hace falta mucho tiempo, años para salir de este horror», insistía y vuelve a recordar en esta entrevista para el medio citado.
Noticias relacionadas