Los conquenses se llevan la permanencia matemática

Espectacular ambiente en el David Santamaría para vivir el gran derbi regional, del que salió victorioso el BM Ciudad Encantada de Cuenca con un resultado 29-31 y la permanencia matemáticamente asegurada. Durante toda la tarde tuvieron lugar partidos amistosos entre equipos alevines, infantiles y cadetes de BM Guadalajara y BM Ciudad Encantada de Cuenca, todo un ejemplo de hermanamiento balonmanístico.

En la grada principal no cabía un alfiler y en el palco autoridades regionales, como el director general de deportes de la JCCM, Juan Ramón Amores, o la coordinadora provincial de educación, Rocío Lopez, presenciaban atentos el encuentro junto a la directiva de BM Guadalajara.

Ambos equipos saltaron a la la pista ataviados con la camiseta blanca de la Coordinadora de Trasplantes de Castilla La Mancha y arrojaron al público camisetas y regalos. El choque comenzó muy igualado, pero pronto los conquenses tomaron la delantera, aprovechando las vaguedades de la defensa alcarreña. César Montes solicitó tiempo muerto en el minuto 15, con 5-8 en el marcador, pero Cuenca parecía tenerle tomada la medida al BM Guadalajara y empezó a alejarse con facilidad. En el minuto 15, con 7-11 en el luminoso, Carlos Barbero sustituyó a Jota Hombrados en portería.

Los de César Montes cambiaron de actitud y se acercaron a los visitantes, forzando a Lidio Jiménez a solicitar tiempo muerto pocos minutos después (min. 27, 9-11). Al final de la primera parte, 10-11 en el David Santamaría y toda la segunda parte por delante.

Durante el descanso, las voluntarias de Red Madre, que instalaron un stand informativo y vendieron papeletas, sortearon una camiseta y un balón firmado por los jugadores del BM Guadalajara.

Chema Márquez puso el gol del empate en el marcador tan solo 30 segundos después de reanudarse el encuentro. A partir de ahí fue un toma y daca continuo, con goles en ambas porterías. Cuenca tomó la iniciativa, adelantando a los morados y aguantando la distancia de uno o dos goles.

En el minuto 23 (22-26) el equipo local reaccionó y se acercó de nuevo (min 24, 24-26), pero nunca consiguió dominar. Los pupilos de César Montes nunca consiguieron ponerse por delante, pero no se dieron por vencido, teniendo opciones hasta el último minuto.El partido se decidió definitivamente en los 60 segundos finales: Lidio Jimenez pidió tiempo muerto a 15 segundos del final, con 29-30 en el marcador. Al ponerse en marcha de nuevo el cronómetro, Víctor Frade sentenció el encuentro, que finalizó 29-31.