Domingo 29 de mayo de 2016
Dice el dicho popular: Tres días hay en el año que relucen más que el sol: Jueves Santo, Corpus Christi y el día de la Ascensión. Pues eso, fiel al dicho, este domingo 29 de Mayo, Guadalajara se vistió de Corpus. Niños y niñas vestidos de blanco participaron en la Solemne Eucaristía que tuvo lugar en la iglesia de San Francisco y que estuvo presidida por el Vicario General, D. Agustín Bugeda.
Tras la celebración religiosa, la Cofradía de los Apóstoles acompañados de los niño/as de Primera Comunión custodiaban el recorrido del Señor por principales calles del casco histórico de la ciudad; la calle Boixareu Rivera “La Carrera”, la Plaza de Santo Domingo con la alfombra elaborada por la Cofradía del Cristo del Amor y de la Paz, la Calle Mayor con la alfombra de la Cofradía de la Virgen de la Soledad, la Calle Mayor, donde a la altura de la Plaza Mayor, a causa del chaparrón, la procesión tuvo que aligerar el paso para llegar hasta la Concatedral.
Una vez retirada la Custodia del Templete –que este año cumplía su décimo aniversario- el Santísimo Sacramento portado por el Vicario General, atravesaba el pórtico de Santa María donde, un año más, las cofradías titulares del Santo Sepulcro y de la Virgen de los Dolores habían elaborado un fino tapiz de arena teñida que daba la impresión de ser una auténtica alfombra de tela.
Además como novedad se había instalado, en el pórtico lateral, el altar de la Cofradía de la Virgen de los Dolores que otros años se ha realizado en otros lugares del recorrido.
Con la entrada de la custodia al templo matriz de Guadalajara y la Bendición Solemne en el interior de la Concatedral, se daba por concluida la procesión.
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