REDACCION | Domingo 30 de octubre de 2016
El Centro Social de Pareja se llenaba de vida ayer, en torno a las tradiciones del Día de Los Santos. En su primera planta, a partir de las 16:30 horas, cerca de treinta parejanos de todas las edades ocupaban las mesas del local para fabricar la bonita tradición de vaciar las calabazas y elaborar con ellas diseños “fantasmagóricos” con los que llenar de “terror” las calles del pueblo, una vez llegara la noche.
Los niños les habían pedido a sus abuelos las que tenían las formas más adecuadas para lo que ellos querían diseñar. En el local del Centro Social, y de la mano de los voluntarios y voluntarias locales, encontraron los materiales de manualidades para fabricar sus diseños que allí había puesto a su disposición el Ayuntamiento de Pareja.
Al filo de las seis y media de la tarde, todas estaban terminadas y listas para ser expuestas en la Plaza Mayor, en torno a la Olma Nueva, que no hace sino crecer, bien sana, gracias a los cuidados de los parejanos. Todos los niños que participaron se llevaron un detalle, igualmente por cortesía del Consistorio. Las calabazas tenían múltiples formas, tamaños y colores.
Cuando por fin cayó la tarde, los frutos de la huerta parejana iluminaron desde su interior, de velas encendidas, muchas de las puertas de las recoletas calles del casco antiguo, componiendo imágenes sobrenaturales, como siempre fuera costumbre en la villa alcarreña.
Mientras, en la planta de abajo del Centro Social, fueron muchos reposteros y reposteras los que, después de cocinar los típicos puches alcarreños, los llevaron hasta la sede de la Asociación de Mayores para que pudiera degustarlos todo el pueblo, subrayando así otra de las tradiciones locales: la de las gachas dulces. Igualmente, el Ayuntamiento tuvo con todos ellos un detalle por su participación. A los que cocinaron el dulce típico de Los Santos se les entregaron unas coquetas bolsas de pan de tela.
Sobre las mesas de Centro Social quedaron expuestas estas gachas dulces para que los lugareños, libremente, los degustaran. Además, a lo largo de todo el día se disputaron los torneos de cartas. Para los ganadores hubo unas botellas de vino y unas cuñas de queso, en esta ocasión por cortesía de la Asociación de Mayores.
Una de las veteranas que se animó ayer a preparar sus puches, Virginia León, explicaba cómo se hacen. “En una sartén se echa una gotita de aceite, después, la harina, de trigo, que hay que rehogar y tostar, muy tostadita, para que tenga el sabor que tiene que tener. Al tiempo, se añade agua con miel, en esa misma sartén, batiéndolo todo bien. Y no tienen más. Al final, cada repostero le da su toque de miel o nueces”, contaba la abuela.
La propia Virginia las hace de una manera especial, utilizando leche desnatada, en lugar de agua, y añadiendo, “según las rehogo, nueces partidas por la mitad”. Sólo cuando se han enfriado, es cuando la repostera añade “miel y nueces enteras” contaba sobre su toque particular. En Pareja, las gachas dulces siempre se han tomado de postre la noche del día 31 y el día 1 de noviembre. Javier Del Río, alcalde de Pareja, agradecía ayer la participación en la celebración de parejanos y parejanas, y también, en nombre del Ayuntamiento de Pareja, destacaba la implicación de las asociaciones Cultural y de Jubilados, “unidos todos por el respeto a nuestras tradiciones y a los que ya no están”.
Día de los Santos.-
En cuanto a la celebración religiosa propiamente dicha, los fieles que así lo deseen podrán bajar al cementerio el martes, día 1 de noviembre. El párroco local, Javier Lucía, rezará un responso por los difuntos, a partir de las 16 horas de la tarde.
Allí encontrarán que el Ayuntamiento de Pareja ha terminado de construir un muro de contención de tierras, rematado en piedra, en el aparcamiento del camposanto. Además, también ha sido asfaltado el camino de acceso al cementerio desde la carretera, que cuenta desde ahora con un doble acceso, en una obra que ha sido ejecutada en este caso por la Diputación Provincial.
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