En los próximos días está previsto que se inicien las obras de renovación de un tramo de 240 metros de la red de abastecimiento de agua potable del casco urbano de Yebes. El ramal en cuestión discurre por el margen izquierdo de la carretera GU-205 y parte de la Urbanización ‘Nido del Ave’ hasta la glorieta de acceso al pueblo por la calle Cantarranas. Con la sustitución de esta tubería de uralita por otra de fundición se pondrá fin a las frecuentes fugas y roturas que ha sufrido esta vieja canalización, “hasta cuatro en los últimos años” en palabras de Vidal Gaitán, concejal de Urbanismo, lo que provoca no solo la pérdida de abundantes recursos de la red de agua potable, “sino también el inconveniente añadido de las inundaciones que se producen en esta zona de Yebes y el riesgo de congelación en la época invernal, que dificulta la circulación en el acceso en cuesta al pueblo desde este punto”.
Esta actuación estaba incluida como mejora en el pliego de licitación del servicio de mantenimiento y conservación del ciclo integral del agua y fue ofertada por la UTE que forman Rayet Medio Ambiente y Valoriza Agua, que se hizo cargo del contrato. En consecuencia y aunque los trabajos están valorados en casi 41.000 euros, “será a coste cero para las arcas municipales”, explica el edil de Urbanismo. El proyecto incluye el movimiento de tierras, obra de fábrica, pavimentos, tuberías y accesorios (válvulas, juntas, empalmes, entronque y codos) y los complementos de acometida y obras varias. Se estima que el tiempo de duración de las obras será de un mes y en ningún caso se verá afectada “ni la circulación de vehículos por la travesía urbana de la carretera GU-205 ni los servicios de electricidad, telefonía y alcantarillado de las viviendas situadas en esta parte baja del pueblo”, explica Vidal Gaitán.
Consistirá en la instalación de una tubería de fundición dúctil que sustituirá a la primitiva conducción de fibrocemento, un material quebradizo que no se adapta a los cambios bruscos de presión y que no se fabrica desde 2003 pero que está en servicio en este tramo desde la década de los 80. Con el fin de que se mantenga el resto de la instalación en servicio mientras se llevan a cabo los trabajos y sirva de conexión con la red existente, en cada uno de los extremos se colocará una válvula de corte y ambas quedarán definitivamente alojadas en el interior de dos pozos que se construirán para la ocasión. En el extremo norte se conectará con la red de PVC, mientras que en el sur quedará acoplado a la red de fundición dúctil. En todo momento, la actuación discurrirá por los márgenes pertenecientes al ancho de la plataforma de la carretera, que en la travesía de Yebes es de 6 metros y casi dos de paseo.
La principal ventaja de la tubería de fundición dúctil que se va a instalar es que tiene revestimientos exteriores e interiores, lo que le convierte en un material altamente resistente, sólido y maleable, que hace que se elimine su posible fragilidad. Además, es capaz de resistir a presiones internas muy altas y cargas externas, unas características que hacen que estas conducciones sean idóneas para rellenos de zanja poco cuidados o en terrenos inestables. “Dada la climatología adversa de Yebes, este tipo de tubería es resistente a cambios extremos de temperaturas de congelación o descongelación”, explica Vidal Gaitán. Por si fuera poco, la fundición dúctil admite las uniones flexibles que se requerirán en este tramo, así como la realización de curvas de gran radio sin que sea necesario hacer uso de accesorios adicionales, “otra de las ventajas que se han tenido en cuenta”.
La conducción que es objeto de este proyecto está conectada con la red procedente del Paseo del Observatorio en PVC y con la canalización de fundición dúctil de la calle Cantarranas. Una vez esté operativa, dará servicio de abastecimiento de agua potable a tres acometidas individuales.