La diputada nacional del PP por Guadalajara, Silvia Valmaña ha subrayado hoy en rueda de prensa que “ayer quedó claro que pretendido referéndum del gobierno secesionista catalán fue un fracaso”. Además, ha destacado que “esta farsa y pantomima de aquellos que impulsaron el referéndum no tiene ni un solo apoyo creíble a nivel internacional”.
Valmaña acusa al gobierno catalán de haber fracturado a la sociedad catalana y se pregunta “qué ha sido de ese 64 % de catalanes que no quiere la independencia”. A ellos “y al resto de los españoles a los que se nos quiere hurtar la posibilidad de decidir quiero decirles que el Gobierno de España no va a rehuir sus responsabilidades y hará lo que en cada momento tenga que hacer”. Cualquier decisión que se tenga que tomar “se hará desde la sensatez, con proporcionalidad, y con la intención de que no se fracture más la sociedad” con el fin de “volver al orden que ayer se intentó romper”.
Durante la rueda de prensa Silvia Valmaña ha querido mostrar todo su apoyo “y todo el apoyo del PP de Guadalajara” a la Guardia Civil y a la Policía Nacional. “Estamos orgullosos del trabajo que realizan todos los días” y ha asegurado que “ayer actuaron con mesura, con el mejor de los criterios y siempre cumpliendo las ordenes de los jueces para defendernos a todos y defender el Estado de Derecho”
A su vez ha hecho un llamamiento a la unidad “de todos los partidos constitucionalistas” evitando “tactismos e intentos de arrimar el ascua a la sardina electoral” porque “está en juego preservar la unidad de España”
En este sentido ha pedido a Emiliano García Page que “dé un paso al frente y demuestre que, de verdad, apoya la unidad de España cesando a su vicepresidente García Molina, una persona que se ha mostrado claramente favorable al independentismo”.
Valmaña le ha pedido a Page que “vuelva a la unidad” porque “ni los castellano-manchegos ni los guadalajareños merecemos tener en el gobierno regional a una persona que apoya el secesionismo catalán y la ruptura de España”. Y ha destacado que “Page tiene en su mano que continúe o no esta vergüenza para Castilla-La Mancha”.
Valmaña no duda de que esta ambigüedad de Page queriendo mantener su sillón presidencial aún a costa de jugar con la unidad de España es lo que ha hecho que la mitad de los militantes socialistas de Castilla-La Mancha le dieran la espalda en el congreso regional que celebraron el sábado.