REDACCION | Miércoles 06 de diciembre de 2017
“Las Campos” son las protagonistas del nuevo número de Semana. María Teresa Campos y sus hijas, Terelu y Carmen, ya están en la Gran Manzana para grabar los nuevos capítulos de su “reality”. La revista tiene todas las imágenes de su alocada aventura americana.
Además, Alba Carrillo contra las cuerdas después de que Fonsi Nieto haya pedido la custodia total de Lucas, el hijo que tienen en común, así como todos los detalles de la boda de Ana Boyer y Fernando Verdasco, que se casarán en el refugio secreto de sus padres, en portada.
Tamara Falcó, todos en su familia se casan: el motivo por el que ella no.-
Tamara Falcó cumplió 36 años el pasado 20 de noviembre, una edad en la que su madre ya se había casado tres veces: con Julio Iglesias, una historia que se convirtió en leyenda, ya que muchos fans del ‘crooner’ español soñaban con su reconciliación, con el marqués de Griñón, lo que suponía un ascenso en la escala social, y con el todopoderoso ministro socialista Miguel Boyer, lo que fue un escandalazo de la época. Y ahora todos estamos esperando la cuarta con Vargas Llosa.
Tamara Falcó es fruto de su segundo matrimonio, con el marqués de Griñón, con quien siempre había mantenido una relación muy estrecha, pero parece que las cosas se han torcido un poco desde que su padre decidió unirse a Esther Doña, una mujer mucho más joven que él, con quien está viviendo precisamente eso, una segunda juventud. No en vano, la ex-modelo manifestaba en SEMANA que el marqués de Griñón está muy rejuvenecido por los antioxidantes del chocolate y el vino.
La vida sentimental de Tamara Falcó ha sido como una película de Walt Disney, al lado de otras ‘socialités. De hecho se le han conocido muy pocos novios, en realidad tres. Y en principio no tiene que ver con sus profundas convicciones religiosas, que se han potenciado en los últimos años desde que se compró una Biblia ilustrada en el verano de 2011.
Tamara Falcó, la más graciosa de los hijos de Isabel Preysler, como la que ha sido la mejor inversión en imagen de una firma cerámica de Castellón manifestó en ‘El Hormiguero 3.0.’, un rasgo que compartía con el italiano Tomasso Musini, a quien vimos por primera vez con ella en un concierto de Lady Gaga en 2010 y a quien conoció cuando buscaba compañero de piso al emanciparse en la zona de Ópera, en Madrid. Posteriormente, volvió a casa de su madre, en la urbanización de Puerta de Hierro, donde reside en la actualidad.
Tamara y Tomaso rompieron en septiembre de 2011, lo que significaba que se ponía punto y final a un noviazgo que parecía idílico. Ninguno se pronunció mucho más allá de ‘seguiremos siendo amigos’. Y hasta hoy…
El primer novio de Tamara Falcó fue Alberto Comenge, hijo de Mari Luz Barreiro, de un matrimonio anterior al que fuera presidente de Prisa, Jesús Polanco. Lo que se llama un amor de juventud y contaba con el beneplácito de las dos familias, pero tampoco salió la cosa adelante.
Del otoño de 2004 al verano de 2005 mantuvimos la ilusión de que la hija de Isabel Preysler podía consolidar una pareja de guapos. No pudo ser. Él se casó en 2014 con la arquitecta Laia Cervelló, una relación muy discreta que han mantenido alejada de los focos.
Tamara supo resurgir de las cenizas de una ruptura junto a Marco Noyer, un financiero franco-austriaco, con quien estuvo entre 2006 y 2009. “Mi novio vive en Brasil y es un royo”, declaró ella para explicar el motivo por el que sus caminos se bifurcaron.
Marco Nayer está ahora comprometido con la ‘it girl’ Bryna Butler, hija del empresario Robert T. Butler. Nobleza obliga, Tamara les felicitó por las redes sociales y los deseó lo mejor. Normal, porque después de romper, en este caso sí, quedó claro que son buenos amigos, porque se les vio juntos en diversas ocasiones en muy buena sintonía.
Después de romper con Tomasso, Tamara volvió a intentarlo junto a Enrique Solís, con menos fortuna si cabe. En este caso, parecía más bien una amistad y ella misma así lo calificó, aunque hubo algunos medios que se empeñaron en apostar por un más allá…
Tamara Falcó sigue soltera, mientras muchos apuestan que su madre se casará en 2018 con Mario Vargas Llosa, y su hermana se casa con Fernando Verdasco. ¿Cuál es el problema? Pues en realidad ninguno. No es que se quiera meter a monja, algo que alcanzó la dimensión de una leyenda urbana. El motivo lo explicó divinamente, como diría Carmen Ordóñez, su madre, Isabel Preysler: “Mi hija pasa totalmente”.
Soltera o casada, Tamara Falcó es una mujer feliz, que ha abordado todos los temas de su vida con naturalidad ante los medios, ha llevado estupendamente su problema con la glándula tiroides, y sigue siendo, a día de hoy, una de las ‘celebrities’ más encantadoras con la que te puedes topar en un ‘photocall’.
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