Si el portavoz del PSOE en la Diputación de Guadalajara, Julio García "tiene un mínimo de decencia debería pedir disculpas y dimitir e irse a su casa"

La diputada provincial en la Diputación de Guadalajara, Yolanda Ramírez, se ha mostrado este viernes satisfecha tras conocer la sentencia que desestima que exista transfuguismo cuando decidió pasar de Ciudadanos al grupo de No Adscritos y ha pedido al portavoz socialista, Julio García, que dimita.

Así lo ha señalado este viernes en nota de prensa tras conocerse la sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº1 de Guadalajara, que desestima la demanda presentada por el portavoz del Grupo Socialista en relación a la decisión que tomó de salir del Grupo Ciudadanos y pasar a la condición de No Adscrita.

Ramírez, que ha recalcado que siempre ha actuado convencida de que su actuación se ajustaba escrupulosamente a la ley y que era una decisión "totalmente legal, legítima y, por supuesto, democrática", ha mostrado su satisfacción por el contenido de la sentencia que dice que el acuerdo alcanzado en Pleno, e impugnado por García, es legal y ajustado a derecho.

"La justicia le da un duro varapalo judicial tanto a él como al Grupo Socialista al que representa, y echa por tierra sus pretensiones que sólo se traducen en aspiraciones políticas frustradas y personalistas, y que pone de manifiesto, una vez más, que este señor ha actuado con mala fe y guiado por el rencor de no haber podido aprovechar esta situación para verse presidente de esta Diputación", ha manifestado Ramírez.

Por ello, ha considerado que García "debería pedir disculpas y dimitir e irse a su casa, si todavía tiene un mínimo de decencia".

Ramírez ha señalado que la resolución judicial concluye que los acuerdos adoptados por la Diputación en relación con su situación son ajustados a derecho, "ni contravienen norma alguna" -ni el artículo 73.3 de la Ley Reguladora de las Bases del Régimen local, ni el Reglamento de Organización y Funcionamiento de la Diputación- y "ni presentan mácula de infracción ordinamental alguna, ni siquiera la de inmotivación", "haciendo inviable su anulación judicial".

Además, con esta sentencia, ha remarcado Ramírez, se demuestra que "no existe caso alguno de transfuguismo" y que tampoco se le puede "achacar la condición de tránsfuga como algunos se han dedicado a repetir cual mantra por aquello de hacer de mentira verdad" o del "calumnia que algo queda".

Ramírez ha informado de que se reserva el derecho de pedir daños y perjuicios hacia su persona.