Lunes 11 de junio de 2018
El Juzgado de Instrucción número 9 de València ha abierto diligencias previas y ha citado a declarar en calidad de investigado al alcalde de la ciudad, Joan Ribó, tras recibir una denuncia del PP por no facilitarles el expediente de una encuesta sociológica sobre las Fallas, según ha informado en un comunicado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV).
El primer edil declarará el día 25 de junio como investigado por presuntos delitos de prevaricación administrativa e impedimento del ejercicio de los derechos cívicos. Es la primera diligencia acordada por el instructor en el marco de una investigación abierta para determinar si los hechos expuestos en la denuncia son constitutivos de delito.
En marzo de 2016, Ribó declaraba que si en alguna ocasión resultaba investigado “no por el fiscal, sino por el juez, pues evidentemente se ha de presentar la dimisión. Esto nos lo debemos aplicar todos. Es una cuestión lógica y normal. No es que esté dispuesto a dimitir, es que estoy obligado a dimitir y eso es coherente”. Sin embargo, no parece que así vaya a ser. Este lunes, el equipo del alcalde ha salido al paso de la imputación asegurando que no creen que sea “una casualidad” que se haya conocido la investigación al primer edil el mío día que se ha publicado la sentencia de la Gürtel valenciana.
La denuncia fue interpuesta por el asesor del PP Luis Salom, que actualmente está imputado en la trama de blanqueo del llamado ‘caso Taula’ por presuntas donaciones de 500 euros de dinero negro al partido. En esta trama están imputados 9 de los 10 ediles que tiene el PP en el Ayuntamiento de València.
Es una más de las denuncias que ha presentado contra políticos de la izquierda valenciana. Una de ellas, contra el concejal de Fiestas Pere Fuset (Compromís) por presunto fraccionamiento de contratos fue archivado por el juzgado tras afearle que no había presentado “prueba alguna ni indicio sólido y serio”. También es conocido por su presencia en redes sociales, donde ha tenido encontronazos con periodistas como Ana Pastor, o por haber registrado la marca ‘Guanyem Barcelona’, que obligó a Ada Colau a cambiar el nombre de su candidatura.
El edil ‘popular’ Félix Crespo ha criticado que ha sido un juzgado el que ha puesto de manifiesto que la actuación de Ribó “no solamente es opaca y está al margen de la ley, sino que hace añicos, en mil pedazos, su etiqueta de paredes de cristal que solo fue un mensaje político desde el primer momento”.
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