Juan Munguira | Martes 07 de agosto de 2018
En estos momentos de guerras comerciales, en la que la dinámica de la confrontación se está imponiendo, debemos centrar la regulación regional en impulsar y ayudar a las compañías a cumplir con los nuevos requisitos de sostenibilidad establecidos en la regulación europea con la finalidad de atraer los flujos financieros europeos hacia las denominadas inversiones financieras sostenibles.
Greenspan señaló en el Congreso Estadounidense en el año 2005 “ la historia nos enseña que los pueblos que disfrutan de largos períodos de estabilidad son proclives al exceso”. El crecimiento económico de los últimos años probablemente no valoro adecuadamente la protección del medio ambiente y se produjeron ciertos excesos en el tratamiento de los recursos naturales.
Castilla-La Mancha es una de las regiones más extensas y con menor densidad de población de España, con un importante abanico de ecosistemas dentro de la gran biodiversidad existente. Existe actualmente un consenso generalizado en torno a la oportunidad de un uso racional de los recursos naturales en el que convivan pacíficamente las explotaciones de agua, las explotaciones ganaderas y agrícolas así como la adecuada protección del patrimonio forestal entre otras prioridades medioambientales.
La política agraria tiene que ir indisolublemente unida a la política de desarrollo rural y por lo tanto a una fijación de la población al territorio. Un desarrollo socioeconómico que permita incrementar las rentas de las zonas rurales acompasada de la sostenibilidad del medio ambiente, es ya una de las prioridades de la política comunitaria.
Una gestión sana del medio ambiente es una parte esencial del desarrollo sostenible y se considera que constituye cada vez más tanto una responsabilidad como una oportunidad para las empresas. La OCDE en sus líneas directrices para empresas multinacionales establece que deberán tenerse en cuenta en la toma de decisiones empresariales los impactos previsibles relacionados con el medio ambiente.
La OCDE recomienda que las empresas establezcan y mantengan un sistema de gestión medioambiental adecuado, que obtenga y evalúe una información adecuada y puntual relativa al impacto de sus actividades sobre el medio ambiente, la salud y la seguridad de los consumidores y usuarios.
La Asamblea General de Naciones Unidas ha aprobado el 19 de mayo del año 2018 una Resolución para la creación de un instrumento jurídico internacional, el denominado Pacto Global del Medio Ambiente. El objetivo final del Acuerdo sobre cambio climático pretende crear un marco jurídico único que garantice la protección del medio ambiente globalmente considerado. El derecho a un medio ambiente sano, el deber de preservación de los recursos naturales y la reparación del daño causado son las premisas del nuevo movimiento internacional de sostenibilidad consensuado universalmente.
A diferencia de otros Acuerdos Internacionales Previos, se pretende que el Pacto Global del Medio Ambiente esté dotado de fuerza vinculante y que se pueda invocar ante los tribunales nacionales. En particular, servirá para que las empresas integren la variable ambiental de manera definitiva, como cualquier otra, ya sea fiscal, laboral o de cualquier otra natulareza.
La Comisión Europea acaba de presentar el 8 de marzo del año 2018 un plan de acción para una economía más ecológica y más limpia, una oportunidad única de captar inversiones sostenibles para las empresas agropecuarias de Castilla La Mancha , con medidas concretas como la creación de normas y etiquetas aplicables a productos financieros sostenibles.
En un corto período de tiempo, hemos pasado del comercio multilateral a las batallas inesperadas, sin reglas ni árbitros. Descartes decía que en la lista de emociones la sorpresa ocupa el primer lugar, pero las tácticas se queman si se abusa de ellas. “Cherchez la femme” se decía antes.
Sorprendamos a nuestros competidores comerciales con legislaciones proactivas y respetuosas con el medio ambiente, abandonemos confrontaciones pasadas y recordemos a nuestros dirigentes que deben abandonar estériles confrontaciones políticas sobre esta materia, ya que tan gloriosa es una bella retirada como una gallarda acometida.
Nuestros gobernantes locales y regionales con independencia de su ideología política deben asumir un liderazgo emocional y real en esta materia, deben movilizar corrientes de dignidad y de dinamismo, que los diques del convencionalismo político no debieran refrenar.
Juan Munguira
Miembro del comité de gobierno corporativo de la OCDE
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