ANPE denuncia que los recortes en Educación están llevando a que alumnos y profesores reciban e impartan docencia en condiciones impropias de los tiempos en los que vivimos.
REDACCION | Miércoles 22 de octubre de 2014
El profesorado se queja de la falta de calefacción y de materiales, dificultando el proceso de enseñanza-aprendizaje. Mientras, los políticos que nos han conducido a la crisis disfrutan de espacios calientes y lujosos. Ya con el anterior Gobierno ANPE exigió que las aulas de Castilla-La Mancha cumplieran con la normativa de Prevención de Riesgos Laborales. Ahora, igualmente, la prevención de riesgos laborales debe dejar de ser una asignatura pendiente en nuestra esfera laboral y convertirse realmente en una herramienta de protección de todos, los docentes y los alumnos. ANPE requiere a la Consejería de Educación que se cumpla con la normativa de Prevención de Riesgos Laborales y con el Real Decreto 486/1997 sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo, puesto que es normativa básica; y así, en ningún caso, se permita dar clase o realizar cualquier tipo de trabajo en los centros que no cumplan con lo establecido en dicho RD. SIGUE
Pedimos que las aulas de Castilla-La Mancha se adapten a las condiciones ambientales que recomienda el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo para los trabajos sedentarios de oficinas y aulas. Además pedimos que los centros de la región sean evaluados en base a dichas referencias, ya que no está sólo en juego la salud de los trabajadores sino, también, la de nuestros alumnos. Así, reclamamos que las aulas cumplan las siguientes condiciones:
En invierno: la temperatura del aula deberá oscilar entre 19ºC y 21ºC; la humedad relativa entre el 40% y el 60%, la exposición continua o frecuente a corrientes de aire no podrá ser superior a 0’15 m/s y la diferencia de temperatura entre 0,1 m y 1,1 m. del suelo no será de más de 3º.
En verano: la temperatura del aula deberá oscilar entre 20ºC y 24ºC; la humedad relativa entre el 40% y el 60%, la exposición continua o frecuente a corrientes de aire no podrá ser superior a 0’25 m/s y la diferencia de temperatura entre 0,1 m y 1,1 m. del suelo no será de más de 3º.
La iluminación deberá ser superior a 500 lux.
Los niveles sonoros continuos equivalentes de ruido aéreo, el tiempo de reverberación y los distintos índices de medición de ruido, se deberán ajustar a lo establecido en la Nota Técnica de Prevención 503 para Centros Docentes, distinguiendo valores propios para las aulas, sala de lectura/biblioteca, salas comunes y gimnasios/polideportivos.
Desde ANPE queremos también recordar que la formación e información sobre prevención de riesgos laborales es obligación de la Consejería de Educación, quien debe hacer que los docentes conozcan cuáles son las condiciones ambientales (temperatura, humedad, luminosidad, ruidos, etc) que deben tener nuestros centros educativos.
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