Más de 700 trabajadores y trabajadoras de prisiones de Castilla-La Mancha están llamados mañana a la huelga

Más de 700 empleadas y empleados públicos penitenciarios de Castilla-La Mancha están llamados mañana a la primera jornada de huelga de las seis convocadas por los sindicatos CCOO, UGT, ACAIP, CSIF y CIG para exigir al Ministerio del Interior que retome la negociación para mejorar las condiciones económicas y laborales del personal. Por el empleo, contra las agresiones, para eliminar la brecha salarial, para recuperar la negociación colectiva y para exigir que se cumplan los compromisos.

En total se han convocado seis jornadas de huelga mañana día 24, el viernes 26 y los días 6, 8, 13 y 15 de noviembre.

Se trata de la primera vez que todos los sindicatos de prisiones se ponen de acuerdo para convocar una huelga, y el motivo es que “el personal de Instituciones Penitenciaras se siente engañado” por el Ministerio de Interior, por retirar una oferta de subida salarial que ya estaba sobre la mesa, y que llegó tras ocho meses de movilizaciones.

Los sindicatos piden al Gobierno que cumpla los compromisos adquiridos con el personal penitenciario y con el mandato constitucional del artículo 25.2 de la Constitución; y volver a la negociación con la propuesta de reclasificación de centros penitenciarios y adecuar el marco salarial a las reales cargas de trabajo y responsabilidad.

El personal de Instituciones Penitenciarias viene sufriendo más de una década de total abandono por parte de quienes nos gobiernan: recortes salariales, en medios y formación, sin carrera profesional, y con una grave falta de personal y envejecimiento que les ha convertido en el colectivo con mayor tasa de siniestralidad laboral, a causa de las agresiones. El sistema penitenciario español ha dejado de aspirar a ser ejemplo para Europa.

Hartos de esta situación, los sindicatos representativos iniciamos un largo proceso de movilizaciones que dura ya varios años, con la finalidad de visibilizar el trabajo penitenciario y obtener el reconocimiento social que nos merecemos.