El portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Guadalajara, Jaime Carnicero, y el concejal Armengol Engonga, acompañados del senador Antonio Román, han visitado esta mañana la zona del margen derecho del río Henares que está siendo objeto de remodelación para su conversión en uso recreativo con la integración de la ribera del río entre el puente árabe y el de la calle Julián Besteiro en la ciudad a través de un importante proyecto puesto en marcha por el anterior equipo de Gobierno del PP. El mismo supone una inversión de 1,5 millones de euros, con fondos europeos, para la recuperación de 64.000 metros cuadrados.
Carnicero ha mostrado su satisfacción por la marcha de unas obras “que dejamos presupuestadas, iniciadas y muy avanzadas”, y que “vemos cómo los vecinos de Guadalajara ya disfrutan de parte de ella”, ha dicho incidiendo en que “sin estar recepcionada ya está abierta al público”, en relación a las críticas de PSOE-Ciudadanos por esta misma cuestión en la obra del parque de la Concordia donde se utilizó la misma ejecución y el mismo material que en la de la ribera. A este respecto, Carnicero aprovechó para “solicitar y exigir al equipo de gobierno que abra ya el parque de la Concordia porque llevan unos días y semanas sin actividad prácticamente, cerrada de forma premeditada e impidiendo a los vecinos disfrutar del parque”.
“Queríamos conseguir, y creo que se ha conseguido, que la ciudad de Guadalajara no estuviera dando la espalda al río Henares y que este fuera también parte de la ciudad, y ya podemos ver cómo una zona sucia y degradada se ha convertido en un parque lineal que ya están disfrutando los niños y las familias”, ha manifestado Carnicero.
En esta línea, el portavoz municipal ha pedido al equipo de Gobierno “que continúe con esta línea de recuperación y rehabilitación del margen derecho del río Henares para que llegue hasta el barrio de los Manantiales, e incluso hasta la zona de Castillejos”, recordando que en el programa electoral del PP se incluía continuar con este ambicioso proyecto en una segunda fase. Y afirmando que “aunque no hay presupuesto aprobado, sí hay partidas presupuestarias gracias a la buena gestión económica que llevó a cabo el equipo de gobierno anterior”.
La actuación se está llevando a cabo en una longitud de 1,5 kilómetros con un paseo de 2,5 metros de ancho que contará con 3 zonas infantiles, una para mayores con ocho aparatos, dos circuitos deportivos, zona de pesca, merenderos, pérgolas, mesas, bancos, toboganes, fuentes y farolas LED algunas de ellas con conexión USB que permite cargar los móviles.
Por otro lado, y dado que esta actuación está comprendida desde el Puente Árabe, Jaime Carnicero ha denunciado las aceras ejecutadas en hormigón impreso en este espacio declarado Bien de Interés Cultural (BIC) y recién rehabilitado por la Junta de Comunidades. “El equipo de gobierno de Antonio Román jamás hubiera permitido llevar a cabo una actuación así en un Bien de Interés Cultural maltratándolo y ahorrando costes, porque a nadie se le escapa que el hormigón impreso es mucho más barato que la baldosa, que es lo que se tenía que haber utilizado para estar acorde con el entorno en el que nos encontramos”.