Domingo 11 de agosto de 2019
Los recibimientos efusivos a dos etarras, uno de los cuales fue condenado por el secuestro del funcionario de prisiones Ortega Lara están bajo la lupa de la Audiencia Nacional, y, más en concreto, del magistrado José de la Mata.
El partido Político VOX y la Asociación de Víctimas del Terrorismo interpusieron sendas denuncias contra los alcaldes de Bildu de las localidades de Hernani y Oñate, Xabier Lerxundi e Izaro Elroza, respectivamente, por los homenajes en ambas localidades a los miembros de la banda terrorista ETA José Javier Zabaleta, «Baldo», y Javier Ugarte, uno de los secuestradores del funcionario de prisiones Ortega Lara.
El magistrados había decidido en un principio incoar diligencias previas tras la denuncia que presentó la Asociación de Víctimas del Terrorismo contra los dos regidores citados, para comenzar la investigación y determinar si existían indicios, tal como sostiene ese partido político, de que en esos actos de homenajes se pudieron incurrir en el delito de enaltecimiento del terrorismo. Sin embargo, toda vez que VOX presentó otra relacionado con los mismos hechos, el magistrado ha decidido acumularlas en un único procedimiento, en el abierto tras la denuncia de la AVT. En el auto del juez se especifica que, a partir de ahora, se acumulan las actuaciones y se continúan en ambos procedimientos «las diligencias de investigación para el esclarecimiento de los hechos denunciados».
El siguiente paso será informe que deba presentar el Ministerio Fiscal sobre si considera hay argumentos suficientes para continuar la investigación, proponiendo en su caso las pruebas que estime oportunas, o, por el contrario, entiende que en esos homenajes no se incurrió en delito alguno de enaltecimiento del terrorismo ni ningún otro. En este último caso, propondrá el archivo de las actuaciones, aunque la decisión final será del magistrado ,quien puede coincidir o no con el criterio de la Fiscalía.
En la denuncia que ha dado origen a este procedimiento, VOX justificaba su denuncia contra los dos alcaldes de Bildu al considerar que la «colaboración en la preparación y celebración de los actos» por parte de ambos consistorios fue una tarea «esencial» para que finalmente se llevaron a cabo. Durante esas celebraciones de homenaje a los dos etarras, se asegura, se escucharon «gritos a favor de la liberación de los presos de ETA».
Este partido esgrimía en su denuncia la doctrina del Supremo y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos para concluir que «estando acreditado que las condenas penales» de los etarras citados «se derivaban de conductas terroristas, la alabanza o justificación de estas acciones son una concreta manifestación del discurso del odio por justificar el recurso a la violencia para la consecución de objetivos políticos, por lo que comportamientos de ese tenor no merecen la cobertura de derechos fundamentales como la libertad de expresión».
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