Los dos chavales, que juegan en el Atlético Almonacid de Fútbol Sala, han sido este año campeón y subcampeón de España, respectivamente, con la selección de CLM en las categorías Sub-16 y Sub-19, por lo que el Ayuntamiento, en el que es uno de los momentos más entrañables del año en la villa como es el inicio de las fiestas patronales en honor a la Virgen de la Luz quiso reconocer su trayectoria.
Almonacid de Zorita. 08 de septiembre de 2019. Con el pregón de fiestas que este año han pronunciado dos jóvenes deportistas almorcileños, como son Pablo Pascual y Rubén Rodrigo, campeón y subcampeón de España en las categorías sub 16 y sub 19, respectivamente, en la modalidad de Fútbol Sala, comenzaba ayer la semana grande que Almonacid de Zorita celebra en honor a su patrona, la Virgen de la Luz.
Desde la amplia balconada del Ayuntamiento, el alcalde de Almonacid, José María Cañadillas, se dirigía en primer lugar a los almorcileños, que prácticamente llenaban la Plaza Mayor. El regidor, ante su estreno al frente del gobierno municipal en las fiestas patronales, afirmó que el equipo que dirige, liderado por Adrián Domínguez, concejal de Festejos, “ha puesto todo el empeño en preparar actividades deportivas, culturales, musicales, taurinas y de ocio, y nuestra máxima ilusión ahora es que disfrutéis de ellas”.
Cañadillas recordó el talento que hay en Almonacid, empezando por el de León Felipe, de cuya presencia en la villa se ha cumplido un siglo en 2019. “Vino boticario, y se fue poeta”, señaló, para citar después a María Valverde, actriz de renombre con un Goya, a Claudio Fuentes, director de Oncología del Hospital de Tenerife y una eminencia en este campo de la Medicina, a Pedro Antonio Cañadillas, premiado por la Peña Taurina Los Cabales, a Jorge Salán, guitarrista y vocalista de talla mundial, y a Guillermo Pérez, reciente premio como diseñador revelación de 2019. Precisamente Pérez recibió de manos del alcalde una placa en reconocimiento a su labor “por pasear siempre el buen nombre de Almonacid por donde quiera que va”, dijo ayer el alcalde de la villa almorcileña.
Cañadillas afirmó desde el balcón del Ayuntamiento que Almonacid “está en La Alcarria olvidada, en medio de ningún sitio, donde viven los herederos del esfuerzo y del trabajo, gente que levantó un país, y que no dejará de trabajar para que no muera su pueblo, como vamos a hacer también nosotros. Este es nuestro gran reto. La lucha por la recuperación. Vamos a pelear duro contra la despoblación, seguiremos trabajando contra ella con las armas que tenemos para, desde la cultura y los servicios que tenemos, atraer a Almonacid un turismo de calidad”, subrayó, antes de gritar los vivas correspondientes a la Virgen de la Luz, a Almonacid de Zorita y a España y dar paso a los pregoneros de 2019.
Rubén Rodrigo agradeció el detalle de la Corporación Municipal por haberle elegido, junto a su compañero, como pregonero, y tuvo unas primeras palabras para su equipo, el Atlético Almonacid, y para su entrenador, Diego Martín. Saludó a las peñas, agradeció al Ayuntamiento su trabajo para organizar las fiestas y a los almorcileños su alegría y participación en todas las actividades.
Pablo Pascual, al igual que había hecho Rubén, tuvo unas palabras para su club de toda la vida, el Altlético Almonacid, y para Diego Martín, “quien no solo me ha enseñado a jugar al Futbol Sala, sino también los valores del deporte, y el respeto, tanto dentro como fuera de la pista a compañeros y rivales”. También mencionó a su familia y sus padres y recordó la importancia del mes de septiembre para los almorcileños, antes de dar los vivas correspondientes. Como había ocurrido con Pérez, los pregoneros recibieron, igualmente unas placas conmemorativas de su participación protagonista en las fiestas de 2019.
Para terminar el acto del pregón, la reina de las fiestas saliente, Alejandra Pérez dijo unas palabras, que tuvieron eco después en la entrante, Arey Pérez, a quien acompañan Desirée Castillo, como dama, y Sergio Ruiz como caballero.
Fue el concejal de Festejos, Adrián Domínguez, quien terminó el acto protocolario, pidiendo a los almorcileños que “disfruten de las fiestas al máximo, siempre con respeto”, antes de pedir a Tole, artesano local, que lanzara el chupinazo, como es costumbre en Almonacid.
La ofrenda floral a la Virgen de la Luz y el canto de la Salve dieron paso al desfile y concurso de carrozas amenizado por la charanga “La Gran Remojá”. Las peñas de Almonacid ofrecieron un espectáculo de colorido y diversión junto a la comitiva que recorrió las calles del municipio, ante la atenta mirada de miles espectadores que llenaron el corazón de la villa Almorcileña. De las nueve que participaron, la mejor, a juicio del jurado, fue la de