Trillo ha despedido este lunes sus fiestas patronales, unos días marcados por la alta asistencia y una gran participación en los actos más destacados de su programa. Así, en una plaza Mayor llena entre vecinos propios y visitantes llegados de municipios aledaños como Cifuentes, Gárgoles o La Puerta, el conocido Mago Yunke despidió de forma mágica unos días festivos que la concejala de Festejos en el Ayuntamiento de Trillo, Marta Pérez, califica como “maravillosos”. “No hemos tenido que lamentar incidentes, hemos conseguido una enorme movilización y participación en todos los actos programados, hemos disfrutado, nos hemos divertido mucho, el tiempo nos ha acompañado y hemos alucinado con la creatividad e inventiva de las peñas… No puede haber mejor resumen de estas fiestas”, en palabras de la edil.
Las fiestas de Trillo comenzaban el pasado jueves, también en una plaza Mayor más llena de lo habitual en los últimos años, con el breve discurso de la alcaldesa, Lorena Álvarez, que pronto dejaba paso a los pregoneros, los miembros de la Peña Los Juncos. La Zubbatucada contribuyó a calentar los ánimos y el chupinazo inauguró oficialmente los días de júbilo y diversión. Los peñistas realizaron el tradicional desfile, con parada obligada en el pilón, donde muchos jóvenes sucumbieron a las aguadillas entre risas.
La cena de peñas y la posterior fiesta de los años 60 y 70 siguieron dando muestra de la alta participación e implicación de los trillanos, pues fueron más de 800 las personas que acudieron a la llamada de las migas alcarreñas con uvas en el frontón.
La intensa jornada del viernes comenzaba con el desencajonamiento de dos novillos en la plaza de toros La Isla y su posterior suelta por las calles. El vermú con la charanga El Conejo de la Loles y los mariachis Platino de México arrastró a numeroso público hacia los bares del pueblo, donde se pudo disfrutar de las canciones de una y otra formación musical.
Si bien hubo un evento destacable del día, ese fue el concurso de disfraces de peñas que se libró en la plaza de toros pasada la medianoche. La mitad del graderío de La Isla –la parte en la que era visible el desfile de disfraces- se llenó de público. Dj Tito fue el encargado de dirigir el certamen y animar al público durante los momentos de espera. La batukada trillana Trilamba, por su parte inauguró el concurso, desfilando con su pegadizo ritmo en los minutos previos al concurso.
El nivel, un año más, se situó muy alto, si bien hubo claros vencedores de esta edición. El Primer Premio fue para el disfraz Walt Disney, de la Peña Ahí Tas Quedao, que recreó de forma muy fidedigna y a la vez cómica algunos de los episodios más famosos de las películas Disney. El Segundo Premio se lo llevó el Kldero y El Gancho, una divertida máquina expendedora de peluches. La trabajada coreografía de las peñas El Trajín y El Desquicio, disfrazados de Grease, les hizo merecedores del Tercer Premio del concurso, mientras que la cuarta posición fue para una boca de tamaño XXL, y, la quinta, para unos dulces adoquines y su jota de la vendimia. En la categoría individual o por parejas, el Primer Premio fue para Las Fofuchas, el Segundo para una preciosa Caja de Música y el Tercer Premio para El Hombre Invisible.
Sin mucho tiempo para reponerse, a la mañana siguiente, los peñistas de Trillo fueron llamados a un descenso más de barcas y estaribeles por el Tajo, y tampoco defraudaron. El impresionante botellín de Mahou de la Peña Rule, Rule se hizo con el Primer Premio y con todas las miradas, dado su gran tamaño, que se aglutinaron a las orillas del Tajo y en lo alto del puente de Trillo. Cientos de vecinos y visitantes colmaron el municipio a mediodía, cuando el río se llenó de colorido, efectos especiales, zambullidas y batallas de agua. El concierto acuático del grupo británico Queen y el trineo de Santa Claus, con sus duendes y renos surcando el Tajo, fueron merecedores del segundo y tercer premio, si bien otras muchas barcas también fueron reconocidas y premiadas, como el Huerto del Tío Pepe de El Cencerro, el lavadero de coches de los Tremen2, el acuario trillano TrilloGrafic o el ring de El Vacío.
El concierto de La Pegatina fue quizá uno de los eventos más esperados y el más multitudinario de las fiestas de Trillo. El conjunto catalán, la cercanía y agradecimiento que mostraron sus componentes hacia el público y la explosión de energía que supuso su música consiguieron que todo el pueblo vibrara a su son. En torno a 3000 personas de todas las edades y llegadas de diversos puntos de la comarca llenaron la explanada de la calle Jardines para disfrutar de los temas de la banda catalana, entre los que no faltaron Lloverá y yo veré, que tocaron en los primeros compases del concierto, o Maricarmen, que fue el encargado de dar por terminado, por todo lo alto, la espectacular actuación.
Ya el domingo Trillo vivió su día grande, la fiesta en honor a su Virgen del Campo. Tras una multitudinaria procesión la noche anterior, en la que el pueblo despidió a su patrona, los fieles volvieron a arroparla en la mañana del 8 de septiembre para devolverla a su ermita, en romería, como es tradición. Allí, en pleno monte y con las torres de refrigeración de la central nuclear como telón de fondo, se celebró una Santa Misa en su honor que fue presenciada por todas las autoridades locales y presidida por el sacerdote trillano Ángel Moreno, Vicario Episcopal para los Institutos de Vida Consagrada de la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara, párroco de varias iglesias del Alto Tajo y capellán del monasterio cisterciense de Buenafuente del Sistal. Se trató de una misa especial, pues Ángel Moreno cumple 50 años como sacerdote, sus Bodas de Oro, y su homilía fue sentida y profunda, e indagó en las raíces de la Virgen del Campo y de su pueblo, Trillo. Tras la misa, la Virgen fue guiada en procesión, para después ser guardada en su ermita, no sin antes llevar a cabo la tradicional subasta a las puertas de ésta.
El encierro por el campo, ya por la tarde, y bocatas de calamares, garbanzos y caldo de cocido madrileño que probaron más de 600 personas en el frontón pusieron fin a la intensa jornada de la Virgen del Campo y a un intenso fin de semana.
Si bien se esperaba menor afluencia de público en los actos programados para el lunes, lo cierto es que tanto el vermú por los bares, como la caldereta y, sobre todo, la actuación del Mago Yunke recibieron una alta asistencia, poniendo fin a unas fiestas muy participativas, en las que la respuesta del público ha sido “lo mejor, sin duda con lo que me quedo de esta edición”, en palabras de la concejala Marta Pérez. La edil agradece, como siempre, su labor a la Comisión de Festejos, “que ha trabajado tanto como siempre o incluso más, a los empleados municipales, que no han faltado a su deber, y a todos aquellos que colaboran y hacen posible que, unas fiestas más, podamos alegrarnos de su buen desarrollo, gracias”, termina Pérez.