REDACCION | Miércoles 14 de octubre de 2020
Marc Ciria (Barcelona, 1979), socio fundador y director general de Diagonal Inversiones, fue en 2015 el responsable económico de la candidatura de Joan Laporta en las elecciones del Barcelona y ahora considera que el préstamo que el club ha pedido a Goldman Sachs para financiar el Espai Barça en realidad tiene como cometido poder pagar los salarios de los jugadores a corto plazo. Para Ciria, las cuentas del Barcelona presentan un estado desastroso, mucho mayor del que la gente piensa. No hay un euro en caja. La situación, casi insostenible.
Así lo explica el mismo Ciria en esta entrevista con EFE. En 2010, cuando trabajaba para Caixa Catalunya, fue el encargado de hacer los avales a la directiva de Sandro Rosell.
.“El club está utilizando la deuda a 30 años por el Espai Barça del cual está hinchando claramente el resultado final del coste, para pagar los salarios de este ejercicio. Y a Goldman Sachs ya le parece bien porque está cobrando unos intereses entre el 3 y el 4 % y si el Barcelona no le paga ya le vendrá un señor. La pregunta es cómo se ejecutará el impago de la deuda: ¿Con el patrimonio del club? ¿Con el estadio? Porque cuando hay un préstamo de un banco de inversión las cláusulas son mucho más firmes que las de un banco tradicional. La junta necesita hacer esto para arreglar los números antes de irse y les da igual el Espai Barça porque no lo harán ellos”, afirma. Y añade: La próxima junta directiva no podrá desarrollar el Espai Barça con este préstamo. Necesitará otro financiamiento y el proyecto se tendrá que reconvertir en algo mucho más barato que consistirá en acondicionar el estadio. Y hasta dentro de 10 ó 15 años el club no se podrá plantear hacer el Nou Palau Blaugrana y el resto de infraestructuras”.
Explica Ciria que “la COVID-19 no tiene nada que ver con la situación económica del Barcelona. Es una mentira de la junta directiva, la cual pretende que un club que facturará 700 millones de euros esté endeudado con 1.600. Esto es impagable con los mecanismos actuales del club. Las dos soluciones viables que plantea esta directiva son la conversión en SAD o la entrada de un fondo de inversión internacional que deje al socio como propietario de un 30 ó 40 por ciento del Barcelona”.
La deuda es el gran problema del Barcelona. Ciria añade que “antes de que apareciera el coronavirus el club ya debía 740 millones de euros y con él ha subido a 820. El principal problema es que es deuda a corto plazo. El Barcelona es el club del mundo con la masa salarial más alta y esto no es culpa del coronavirus. La deuda que se necesita pagar a corto plazo es del 77%. Eso significa que no hay que no hay dinero para pagar las nóminas ni algunos proveedores. Así que el incremento de la deuda ha sido para pagar el día a día del club, no el Espai Barça”.
Noticias relacionadas