Castilla-La Mancha pierde 196 autónomos en julio, Guadalajara la provincia que más pérdida sufre (-0,3%)

Miguel Ángel Rivero: “El motivo principal es el incremento de alquileres, materias primas, energía, gastos financieros y demás gastos cotidianos”

Castilla-La Mancha ha perdido 196 autónomos en julio respecto a junio de este año. “Una tendencia bajista que se ve muy marcado en el sector del comercio”, ha señalado el presidente de ATA Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Rivero. “El motivo principal es el incremento de alquileres, materias primas, energía, gastos financieros y demás gastos cotidianos”.

“Muchos autónomos venden a pérdidas. Por eso recalcamos la importancia de bajar los pagos a cuenta, para que ese dinero, que sirve de financiera del estado, pasara a estar en el bolsillo de los autónomos”, ha añadido Rivero.

El número de autónomos en Castilla-La Mancha se situó al término de julio (datos medios conocidos hoy) en 149.889 autónomos. En términos interanuales (julio- julio) hablamos de una caída del 0,8% (-1.181 autónomos) mientras que en este periodo el conjunto del territorio nacional suma trabajadores por cuenta propia. En lo que llevamos de año (enero – julio), la región ha perdido un 0,2% de sus autónomos. “No hay dato positivo. Desde ATA C-LM consideramos que se deben seguir haciendo políticas que, por lo menos, no lastren la actividad del autónomo. No olvidemos que, en regiones tan despobladas como la nuestra, son los autónomos los que fijan la población y los que dan puestos de trabajo estables”, ha asegurado Miguel Ángel Rivero, presidente de ATA C-LM.

Cuenca es la única que suma autónomos en el mes de julio
Porcentualmente es Guadalajara la provincia que más autónomos pierde en el último mes en la región, con una caída del 0,3%. Le sigue Toledo y Albacete con un -0,2% y Ciudad Real en la media regional en el 0,1%. Cuenca marca la nota positiva del mes creciendo en un 0,2% su afiliación de autónomos, al sumar 36 en julio.

Por género son ellas las que más afiliación pierden y en los sectores destaca la pérdida, habitual en los meses de verano, del sector de la educación, muy ligado también al autoempleo femenino.