Vecinos de la comarca de Molina abandonan sus pueblos por el deterioro de la atención sanitaria

El protocolo de colaboración entre comunidades limítrofes para la atención sanitaria ha dejado de cumplirse como consecuencia de los recortes que están aplicando Cospedal en Castilla-La Mancha y los gobiernos del PP en Aragón y Valencia. Esto significa que los vecinos de 21 municipios de la comarca de Molina, 14 de la sierra y 7 del Valle del Mesa, que hasta ahora eran atendidos en sus hospitales más cercanos (en las provincias de Teruel, Zaragoza y Valencia), están siendo derivados para consultas externas, pruebas diagnósticas y hospitalización a centros mucho más lejanos, en Albacete, Ciudad Real y Guadalajara. SIGUE

Ante esta situación, ya se han constatado varios casos de vecinos de estos municipios que se han censado en Teruel, Zaragoza y Valencia para seguir recibiendo la atención sanitaria que tenían hasta ahora y son muchos más los que se lo están planteando, según ha denunciado la alcaldesa de Alustante, Rosabel Muñoz. Como ejemplo de lo que este proceso puede significar para los pueblos afectados, Muñoz ha citado el caso de Tordesilos, donde un total de 20 matrimonios se están planteando censarse fuera por este motivo, lo que supondría que este municipio perdería aproximadamente la mitad de su población actual.

La denuncia pública de la alcaldesa de Alustante ha sido corroborada por Francisco Lorente, vecino del municipio y profesional sanitario de la comarca, que tiene contacto directo y diario con la población de la zona. En opinión de Rosabel Muñoz, “este proceso, que de momento ha comenzado como un continuo goteo de pérdida de población, demuestra que los recortes en servicios públicos básicos son la puntilla definitiva a nuestros pueblos”.

“El SESCAM y la Junta lo niegan, pero la realidad cotidiana de nuestros pueblos les desmiente”.

Rosabel Muñoz ha explicado que, ante la constatación de estos hechos, se puso en contacto con la gerente del Hospital de Guadalajara y con el delegado provincial de la Junta, quienes “niegan que haya cambios en el funcionamiento del protocolo de colaboración de atención sanitaria con las comunidades limítrofes, pero la realidad cotidiana de nuestros pueblos les desmiente, porque son los vecinos quienes nos dicen que ya no se les atiende en los hospitales de Aragón y Valencia”.

Para poner freno a este proceso de pérdida de población en la comarca, ya que quienes se censan en provincias limítrofes de fuera de la región, generalmente personas mayores, acaban quedándose allí para recibir la atención sanitaria que de otra forma se les niega, la alcaldesa de Alustante ha lanzado una serie de reivindicaciones: el mantenimiento y ampliación de especialidades en el centro sanitario de Molina, el mantenimiento de la UVI Móvil de Molina y la actual red de ambulancias, la continuidad de los actuales centros de salud y sus servicios de urgencia, el mantenimiento y ampliación del número de consultas médicas en todos los pueblos y el cumplimiento del protocolo de colaboración entre comunidades autónomas limítrofes.

“Les pido a Cospedal y a los distintos gobiernos del PP que no vean solamente cifras, porque son personas las que están sufriendo sus recortes, y por eso deben garantizar unos servicios sanitarios adaptados a las características y necesidades del territorio”, ha concluido Muñoz.

Los recortes tienen efectos directos sobre la salud y mortalidad de las personas.

Por su parte, la portavoz del Grupo Socialista en la Diputación de Guadalajara, María Antonia Pérez León, ha añadido que “los recortes sanitarios que se están produciendo desde que Cospedal preside el Gobierno regional tienen efectos reales en el día a día de las personas” y ha pronosticado que “pronto tendrán su reflejo en los indicadores de salud, mortalidad y morbilidad de los pacientes”.

“A día de hoy, el desmantelamiento de nuestro servicio sanitario ya está teniendo efectos directos de pérdida de empleos y estos otros que denunciamos hoy, porque suponen un rejón de muerte a nuestros pueblos”, ha señalado Pérez León.