Francisco Vives Camino, de Azuqueca de Henares y primer presidente del Atlético de Madrid

Vives nació en 1900 en la ciudad de Alcalá de Henares, pero pasó la mayor parte de su vida en Azuqueca de Henares haciendo gala del dicho “uno no es de donde nace sino de donde pace”. Hijo del famoso militar Pedro Vives, considerado uno de los padres de la Aeronáutica Española, decide ingresar en la alabada Academia de Ingenieros de Guadalajara, donde coincide con Francisco Iglesias Brage, futuro as de la aviación, al mando del Jesús del Gran Poder.

Una vez terminada su formación como ingeniero, decide realizar el curso de piloto de aeroplano. En 1923 es ascendido a Capitán y destinado al protectorado de Marruecos, donde es herido gravemente cuando volaba a baja altura en el ataque a la posición enemiga de Sidi Messaud.

Este incidente hizo que Vives decidiera volver a Azuqueca de Henares para recuperarse de sus graves heridas. Tras un largo periodo de recuperación, el Comandante Vives volvería a las “Alas Españolas” para un acontecimiento que marcaría de por vida la estrategia militar mundial : El desembarco de Alhucemas.


El desembarco de Alhucemas es considerado el primer desembarco aeronaval de la historia militar y fue estudiado por el general estadounidense Dwight Eisenhower como modelo táctico para el Desembarco de Normandía. La operación militar española consistía en el ataque combinado de más de 13.000 hombres cubiertos por fuerzas navales y aéreas.

El desembarco de Alhucemas comenzó a las 11.30 del día 8 de septiembre en las playas de Ixdaim y la Cebadilla. Mientras los caballeros legionarios desembarcaban, y los acorazados españoles Jaime I y Alfonso XIII cañoneaban sin cesar las posiciones rifeñas, se alzaron en el cielo como ángeles, las escuadrillas aéreas españolas.

Al frente de una de estas escuadrillas, se encontraba otro ilustre alcarreño don Mariano Barberán, que comandaba la escuadrilla en la que se encontraba su compañero y amigo Francisco Vives. La escuadra formada por Breguets XIX ametralló sin piedad las posiciones rifeñas, haciendo más fácil el establecimiento de una cabeza de puente en la playa africana. La victoria significó la derrota del cabecilla insurgente Abd el-Krim, que tuvo que entregarse al gobierno francés, y la pacificación de todo el protectorado español.

Al acabar la guerra, Vives regresa a la península donde establece grandes amistades con los intelectuales de la Residencia de Estudiantes de Madrid. Colaborará además con los tres grandes hitos de la aeronáutica española, el vuelo del Jesús del Gran Poder, el vuelo de Sevilla a Bata y sobretodo en la hazaña de Cuatro Vientos debido a la gran amistad que le unía con Barberán. Vives pasó unos años en La Habana como agregado militar en la embajada española.

En 1934 regresa a España donde ocupa diferentes puestos en el ministerio del aire.

Una vez terminada la guerra civil a Vives le sucede algo muy curioso, y que a lo mejor a los que no somos muy forofos del Atlético de Madrid no nos suene, el hecho es que Francisco Vives se convertirá aunque por poco tiempo en el primer Presidente del Atlético Aviación, actual Atlético de Madrid que en estos últimos días tan de moda está.

Francisco Vives murió en Azuqueca de Henares un 5 de Junio de 1997, después de haber cumplido una vida totalmente dedicada a las “Alas Españolas” que tanta gloria han dado a la historia de nuestro país.

José Luis Alguacil Rojo