La presidenta electa de Castilla-La Mancha reconoce estar “ante la peor herencia recibida por parte de ningún Gobierno”
Se acabó lo que se daba. Cospedal cierra el grifo a los grupos políticos, a los sindicatos y organizaciones patronales
Por
María Luisa de la Mancha
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:14h
La presidenta electa de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, anunció en la segunda sesión del pleno de investidura que acogen las Cortes Regionales, que va a proponer “la reducción de forma sustancial la asignación a los grupos parlamentarios de los partidos políticos”, algo que, en su opinión, van a entender muy bien los ciudadanos, así como racionalizar y reducir “las partidas que en forma de subvención están asignadas a las organizaciones sindicales y patronales en esta región, y sé que puedo contar con las responsabilidad de los representantes de los trabajadores y de los empresarios”. Cospedal, en su respuesta a la intervención del portavoz del Grupo Socialista, José María Barreda, insistió en que su “obsesión” es el empleo y lamentó que en Castilla-La Mancha “tengamos la peor herencia que haya recibido ningún Gobierno”. CONTINUA
En este sentido, se refirió al “drama para esas más de 216.000 personas que en Castilla-La Mancha hoy no tienen un puesto de trabajo” y se mostró firmemente convencida de que son políticas adecuadas “apostar por políticas que ayudan a los autónomos y a la pequeña y mediana empresa, para que no asfixien, no tengan que cerrar y puedan mantener los puestos de trabajo, porque son los que crean el 85 por ciento de los empleos de la región”.
Modificación de la Ley Electoral
En respuesta a Barreda, respecto a la Ley Electoral, Cospedal aclaró que “tenemos una ley cuya modificación fue aprobada sin consenso, cambiada después de llegar a un acuerdo sobre una reforma estatutaria donde se establecía que la modificación de la Ley Electoral tenía que hacerse por unas mayorías, e inmediatamente después usted propuso la modificación de esa Ley Electoral”. Así, recordó que una de sus propuestas será que, “con el consenso y el diálogo que hace falta tener en este tema y también con la participación de todos los agentes sociales y de todo tipo que entendamos en estas Cortes que tienen que estar involucrados en la decisión de estas materias, procederemos a la modificación de la Ley Electoral para que un voto de un ciudadano de una provincia no valga más que 25.000 votos de ciudadanos de otra provincia”.
La presidenta electa volvió a tender su mano al diálogo y al consenso al Grupo Socialista. En cuanto a los servicios públicos, Cospedal subrayó que los gobernantes tienen la obligación de ofrecer el mejor servicio a los ciudadanos y recordó que “mientras esa posibilidad, después de mirado el estado financiero que ustedes han dejado, nos sea posible, ayudaremos para que los castellano manchegos que viven en zonas limítrofes -con otras comunidades- puedan ser atendidos de la mejor manera, a mi me gustaría que fuera aquí, pero no voy a mirar que sea aquí o dos kilómetros más allá, porque lo primero es que tengan el mejor servicio”.
Por otro lado, preguntó a Barreda qué respuesta busca cuando pregunta si se van a completar los proyectos pendientes, porque “todas esas cosas se pagan y el dinero no se hace con una máquina”, por lo que “lo primero que tendremos que ver es el estado de las cuentas y la situación financiera de la Junta”.
A ello, añadió Cospedal que, “en cualquier caso yo espero que todos esos proyectos diseñados, planificados, ejecutados y listos para poner en marcha tengan su dotación presupuestaria consignada y equilibrada en el presupuesto para poderles hacer frente, -continuó Cospedal- porque si no, no sé cómo iba a hacerles frente, o es que usted estaba prometiendo cosas que sabía que nunca iba a cumplir, y yo no quiero comprometerme a cosas que no vaya a cumplir”.
Plan Hidrológico Nacional
En relación con el tema del agua, la presidenta electa de Castilla-La Mancha destacó que es evidente que en las tres décadas de gobiernos del PSOE en la región “el problema no se ha solucionado”, y reiteró que “nosotros apoyamos y creemos firmemente en la necesidad de un Plan Hidrológico Nacional que garantice el agua en Castilla-La Mancha”, algo que ha defendido siempre en las Cortes el Partido Popular y que siempre ha contado con el voto en contra del Partido Socialista.
“Ese Plan Hidrológico tiene que tener como mínimo salvaguardados los principios de unidad de cuenca, de preferencia de la cuenca cedente para los usos presentes y futuros, de sostenibilidad medioambiental y también de solidaridad interterritorial”, añadió Cospedal, que opinó que Barreda no puede decir que no quiere “hacer política de la confrontación o de la utilización de las pasiones humanas de manera exacerbada, si después toda la política del agua durante estos 30 años en Castilla-La Mancha ha sido, al menos durante sus años de Gobierno, exclusivamente una política de confrontación”.
Además, Cospedal añadió que “los agravios no generan confianza; y quienes plantean campañas o políticas en relación con los agravios tienen muchas papeletas para que las cosas no salgan bien”. Por ello, manifestó que “lo que genera credibilidad y confianza es plantear las situaciones con transparencia, sobre todo cuando es tan evidente lo que está pasando y decirles a los ciudadanos que no tenemos nada mejor que hacer que trabajar por ellos”.