Este fin de semana se jugaban las semifinales del trofeo Alto Henares. El CD Mandayona batía a CD Pinilla en la tanda de penaltis, mientras que el CD Baides ganaba a Membrillera 4-3. El próximo sábado a las 17.30 horas ambos clubes disputarán la final en Membrillera, ya que este año son los anfitriones del torneo.
El partido más igualado de los dos fue el disputado entre el CD Mandayona y el CD Pinilla. En la primera parte se adelantaba en el marcador el CD Mandayona con un gol de Pablo Delgado, pocos minutos después empataba el CD Pinilla. Aunque las ocasiones eran del equipo visitante y puedo ponerse por delante en el marcador, al comienzo de la segunda parte fueron los locales los que se adelantaron en el marcador.
Según iba avanzando la segunda parte los nervios y las paradas del equipo local hicieron que el CD Mandayona se viera fuera del torneo, sin embargo a pocos minutos del final Álvaro Cantero consiguió el empate lo que hizo que el equipo visitante se viniera arriba, mientras el desánimo embargaba al equipo local.
El partido terminó con un empate y llegaba la tanda de penaltis, aunque el portero local hizo un gran partido, en los penaltis se lució el portero del equipo visitante, Guille, con dos paradones que le dieron el pase a la final al CD Mandayona.
Fueron los visitantes quienes comenzaron con la tanda de penaltis tirando el primero fuera. Luego era el turno de Iván Bermejo, uno de los grandes goleadores del CD Mandayona, y como no podía ser de otra manera no falló. El siguiente penalti fue parado por Guille, un especialista en penaltis que desde que lleva en el club ya ha tenido varias paradas decisivas como la que hizo hace dos años contra Carrascosa y que le dio el título al CD Mandayona.
El siguiente en tirar fue Jaime Porras, aunque el portero tocó el balón, consiguió entrar lo que dejó mucha presión para el siguiente jugador del CD Pinilla. Otra vez Guille paró el penalti, si Mandayona marcaba estaba en la final y fue Francisco Sanz, uno de los emblemas del equipo, el que consiguió meter el gol. La locura se desató en el campo del CD Pinilla y toda la afición fue a arropar a sus jugadores para darles ánimo para la final del próximo sábado en Membrillera.