El equipo de Gobierno ha aclarado esta mañana que la casona del Poblado de Villaflores que se ha derrumbado no es de titularidad municipal. Según el proyecto de reparcelación aprobado en 2008, dicha casona se encuentra en la parcela de 26.000 m2 que es propiedad de Hercesa Inmobiliaria S.A.
El Consistorio afirma que la parcela es propiedad de Hercesa
Así lo ha señalado el concejal delegado del Poblado de Villaflores, Ángel García, quien ha explicado que el Ayuntamiento de Guadalajara, tras ser declarado el Poblado de Villaflores Bien de Interés Cultural por parte de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha el pasado 21 de abril de 2015, redactó una memoria, en cumplimiento con lo exigido por la administración regional, para la protección de huecos y accesos en los edificios de su propiedad. El propósito: preservar los edificios de posibles actos vandálicos y garantizar la seguridad de las personas.
Las acciones contenidas en dicha memoria fueron ejecutadas por el Ayuntamiento de Guadalajara, con cargo al presupuesto municipal, durante el segundo semestre de 2015. Tal y como ha explicado el concejal, “se tapiaron los edificios que son de nuestra propiedad, tales como la bodega, las ocho viviendas de los colonos, la capilla, las naves y el palomar”. Preguntado sobre si por parte de la mercantil propietaria de la casona derrubada se habían realizado actuaciones similares, ha señalado que no le consta.
El concejal también ha manifestado que el Ayuntamiento de Guadalajara está trabajando en la redacción del Plan Especial de protección del poblado que conlleva su declaración como B.I.C. Incluirá la realización de obras de consolidación de los muros y cubiertas de los edificios que son de su propiedad. Ángel García ha señalado que posteriormente el propósito del Ayuntamiento es convocar un concurso de ideas para determinar el uso del complejo.
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