Se hace llamar Roi, Alex, Adrián, Leto… y, según sus perfiles en internet, es francés, suizo, italiano y sueco. Pero su verdadero nombre es Rodrigo Nogueira, nació en Galicia y acumula denuncias por estafa desde hace 15 años. La mayoría han sido archivadas. Ahora, 20 mujeres se han unido contra él. Cinco de ellas cuentan su historia a Interviú y advierten de su peligro: “Caza mujeres en la red, se convierte en el novio perfecto y, antes de darte cuenta, te roba el dinero y la autoestima”. Él asegura que es inocente. Lo conocen como el “donjuán de Marín” (Pontevedra), su pueblo, pero las mujeres que acusan a Rodrigo Nogueira, de 39 años, aseguran que “es bajito y tiene los dientes podridos”. Así que son su “labia” y su “pose de hombre de mundo” lo que han hecho caer en la red a decenas de mujeres desde hace 15 años. A simple vista, su supuesto engaño parece sencillo, según varias de sus víctimas: “Caza a mujeres en la red, se traslada a tu ciudad, se convierte en el novio perfecto y, antes de darte cuenta, te roba el dinero y la autoestima”, inventándose alguna desgracia personal para la que necesita una ayuda que ellas le dan. Cuando lo descubren, cambia de identidad y desaparece. Nogueira lleva tiempo “perfeccionando su timo”. En 2001 fue condenado a un año de prisión por hurto. Desde entonces ha sido detenido por la policía al menos en dos ocasiones, tras ser denunciado por varias mujeres. Una de estas denuncias prosperó en un juzgado de Vizcaya (ver recuadro de la página 48), donde Nogueira está siendo investigado; pero la mayoría de ellas han quedado archivadas por falta de pruebas. Ahora, 20 mujeres se han unido en su contra. Presentarán documentación a la fiscalía para que investigue los presuntos delitos de Nogueira en conjunto. Cinco de ellas han contado su historia a interviú. “Es una garrapata que ataca al más básico de los instintos: el afecto”, señala una agente de viajes de 41 años que lo denunció en Madrid en octubre de 2007. Su denuncia fue archivada. Al igual que las otras afectadas, prefiere mantenerse en el anonimato. Cuenta que conoció a Nogueira en la página de contactos por internet Amigosfree. El gallego se presentó como Alex Betancourt, un publicista de ascendencia francesa que viajaba con frecuencia a Alemania por su trabajo en una conocida agencia: “Me hablaba de la historia de Francia, de la Primera Guerra Mundial. Nuestras conversaciones hacían que yo olvidara la estrechez de mi cubículo de trabajo”, recuerda. Quería sexo sadomaso Luego empezaron los problemas: “Me pidió 300 euros para pagar al fontanero. Me dijo que se le habían roto las tuberías del piso que compartía con varios compañeros”. Según la mujer, su relación con Nogueira duró cuatro meses y terminó poco después de que ella se negara a mantener relaciones sexuales con él: “Me llevó a su supuesto piso, que en realidad era la casa de otra víctima con la que en aquel momento vivía y me sacó un maletín de BDSM [prácticas sexuales relacionadas con el bondage y el sadomasoquismo], pero yo me tomé su proposición a broma”. interviú ha hablado con Nogueira, quien asegura que no es un embaucador, que nunca se ha hecho pasar por otra persona: "Me gusta ligar, pero no soy un estafador ni un psicópata". Descubre cómo actuaba Nogueira aquí, en nuestra edición PDF.
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