El CD gana, pero se duerme en la segunda parte

La buena noticia tras el partido de CD Guadalajara fue el triunfo alcarreño ante el Minaya; la mala, el bajón de rendimiento que dio el equipo de Mínguez tras el descanso y que estuvo a punto de darle un disgusto. Y es que los alcarreños desaprovecharon una renta de 5-0, con la que cerraron el primer acto.

La jornada se preveía festiva, con la presentación de la cantera y el homenaje al equipo benjamín que se ha proclamado campeón provincial. Se planteaba una fiesta que se iba completando según transcurría el partido. Y es que nada más comenzar el choque, Isma convertía un rechace del portero visitante en el 1-0. Era la mejor forma de dejar patente las intenciones del equipo. El gol hizo daño al Minaya, que se mostró muy nervioso y que se veía incapaz de salvar la defensa de un Guadalajara que en ataque acosaba una y otra vez la puerta albaceteña.

Tanto apretaba arriba el CD que llegó el tanto de Daviciyo a los 10 minutos, de un lanzamiento lejano; tres minutos después, Charly hacía el tercero y antes de cerrar la primera parte hubo tiempo para los goles de Miguel y de Uga, que reaparecía después de su lesión. La fiesta en ataque era total y en defensa, si algún hueco quedaba libre, el rival se encontraba con un inspiradísimo Javi Lozano.

Pero llegó el descanso y algo pasó en los jugadores del Guadalajara, que convirtieron la fiesta en sufrimiento y casi en castigo. A los siete minutos, el Minaya había recortado diferencias (5-2), lo que obligó al tiempo muerto de Isma Mínguez. Los visitantes apostaron por el portero-jugador, justo en el momento en el que el Guadalajara sumaba su quinta falta.

Era el minuto 8 de partido. Un gol en propia puerta de Minaya (6-2) tranquilizaba a los de Guadalajara, pero los de Albacete lo seguían intentando y así, dos tantos más apretaban el marcador (6-5) en un partido en el que se quedaron sin tiempo para culminar la remontada.