Quiero comenzar aclarando el termino que utilizo en el encabezado, segun Wikipedia:
El término homofóbia hace referencia a la aversión (fobia, del griego antiguo φόβος, Fobos, ‘pánico’) obsesiva contra hombres o mujeres homosexuales, aunque generalmente también se incluye a las demás personas que integran a la diversidad sexual, como es el caso de las personas bisexuales o transexuales, y las que mantienen actitudes o hábitos comúnmente asociados al otro sexo, como los metrosexuales y los hombres con ademanes tenidos por femeniles o las mujeres con ademanes tenidos por varoniles. El adjetivo es «homófobo» u «homofóbico».
Existe cierto relativismo sobre lo que abarca el concepto de homofóbia. Así por ejemplo, los que rechazan las políticas de igualdad (entre personas de diferente orientación sexual) consideran que ese rechazo no es homofóbia, sino simplemente una opinión igualmente respetable como la aprobación.
Homofóbia no es un término estrictamente psicológico. Se calcula que en el año 2000 cada dos días una persona homosexual era asesinada en el mundo debido a actos violentos vinculados a la homofóbia. Amnistía Internacional denuncia que más de 70 países persiguen aún a los homosexuales y 8 los condenan a muerte.
Una vez aclarado el significado de la palabra HOMÓFOBO, me siento impulsado a expresar mi absoluta repulsa, mi enfado y tristeza, tristeza por tener que redactar esta nota por este motivo, algo que creía de tiempos y mentalidades pasadas.
Dentro de mi compromiso de ayuda, apoyo y asesoramiento a los componentes de esta Institución, de la que formamos parte. y como representante de esta Asociación, he tenido conocimiento de un comportamiento repugnante.
Un gran profesional, gran compañero y gran persona; así lo consideran los que le conocen; esta sufriendo insultos, “mofas”, faltas de respeto hacia su persona, hacia sus familiares y abuso de autoridad. Un superior inmediato de su Unidad profesa frases como “******, ha sido la manifestación esa de los tuyos, los Maricas, pidiendo derechos y eso”, “*****, a tu hermana la cabalgaba y le hacia el 69”, y alguno mas que no deseo, ni puedo, reproducir. Estas “Mofas” comentarios, faltas de respeto, demostraciones de inteligencia y educación, las profiere en publico, con el consentimiento y aplauso del inmediato superior en la unidad, ese que debería respetar y hacer respetar las leyes, quien no tiene reparo en soltar una absurda carcajada ante los comentarios de este HOMÓFOBO, que denomina al personal bajo sus ordenes como “Numero”.
No puedo dejar de expresar el sentir de los componentes de este cuerpo, trabajamos en condiciones difíciles, utilizamos medios ajustados, ponemos empeño e interés en dar la atención que merece el ciudadano, por lo que la valoración que damos de cualquier componente del cuerpo (Compañer@s) es la profesional, la que refleja el compañerismo y la que demuestra cada cual, no valoramos a las personas por raza, religión, genero, ni mucho menos, por su orientación sexual, ya que todo lo extraprofesional queda en ámbito privado, por lo tanto digno de respeto. No dejamos de ser ciudadanos y parte de nuestra sociedad, en la que ese tipo de conductas están muy olvidadas y alejadas.
Ahora debo dirigirme a Usted, tratamiento que debo darle “Por Galones”, reflexione, intente valorar sus acciones, medite, cambie de pensamiento y pida disculpas, no solo al compañero insultado, humillado y del que abusa de autoridad, hágalo al resto de nuestro colectivo en particular y a la sociedad en general. Valore a las personas por su educación, su comportamiento y sus acciones, ya que la valoración de Usted merece, como persona, esta desfasada (Necesita un reciclaje) o como el ordenador desde el que redacto este escrito “Una actualización”.
Espero que estos, repugnantes, comentarios no se repitan, creo que si tiene Usted un mínimo de inteligencia, no los volverá a realizar, ya que la sociedad y los Guardias Civiles no comparten sus ideales y pensamientos, independientemente de las acciones penales y disciplinarias a las que deberían dar lugar.
Estos hechos han sido puestos en conocimiento de los responsables de esta comandancia con potestad para aportar una solución. Esperamos la respuesta justa.
Por ultimo solo queda despedirme con un saludo militar “A sus ordenes Mi Cabo” y dejarle claro que si mide al compañero afectado por su respuesta profesional, su compañerismo y exquisita educación, se encontrara con muchos “Maricas”, ya que la mayor parte de nuestra sociedad actúa con ese grado de amistad, compañerismo, educación y profesionalidad.
Lamento no poder ser claro y directo, ya que no disfruto de libertad de expresión dada mi condición laboral.
(Afortunadamente, el saludo es solo de forma Castrense, soy afortunado y no estoy bajo las ordenes de este Señor)