Un año y medio después de ganar las elecciones autonómicas pero perder la Junta por quedarse a un escaño de la mayoría absoluta, el PP estaría en condiciones de recuperar la presidencia de la Junta
Después de un año y medio de Page/Podemos, diversas encuestas otorgan al PP mayoría absoluta en Castilla-La Mancha
miércoles 04 de enero de 2017, 01:03h
Después de cuatro años gobernando por primera vez Castilla-La Mancha, el PP se vio desalojado del Palacio de Fuensalida por el pacto entre PSOE y Podemos que en el verano de 2015 invistió al socialista Emiliano García-Page como presidente de la Junta.
Los populares, liderados por María Dolores de Cospedal, consiguieron en las elecciones autonómicas 16 de los 33 escaños de las Cortes castellano-manchegas, con el 37,49% de los votos. Los socialistas consiguieron sumar a sus 15 diputados (36,11%) los dos de Podemos (9,75%), mientras Ciudadanos con el 8,64% se quedó fuera por la ley electoral regional.
Pues bien. Fuentes bien situadas en el Partido Popular de Castilla-La Mancha revelan a El Confidencial Autonómico que las encuestas que ellos manejan y que no son públicas indican que, de celebrarse ahora elecciones regional, ganarían por mayoría absoluta y recuperarían la Junta.
La intención de voto que registran los estudios demoscópicos que han llegado a la dirección del PP castellano-manchego muestra que los populares incluso ampliarían la distancia que le sacaron al PSOE en la última cita con las urnas, las elecciones generales del 26 de junio de 2016.
En esa ocasión, el Partido Popular le sacó 15 puntos al Partido Socialista en el conjunto de las cinco provincias de Castilla-La Mancha: 42,79% y doce escaños por 27,31% y siete diputados del PSOE. Aunque hay que señalar en esta comunidad tradicionalmente el PP consigue sacar mejores resultados en las elecciones generales que en las regionales: de hecho, hasta en los años de hegemonía socialista con José Bono, cuando había elecciones a Cortes Generales los populares le daban la vuelta a los resultados.
Tal y como publica el Confidencial Digital, aún con estos resultados que les dan las encuestas que manejan, los populares castellano-manchegos son cautos. Además, han decidido no dejar caer ahora a Emiliano García-Page, que ha perdido el apoyo de Podemos y ha tenido que prorrogar los presupuestos de 2016.
Fuentes populares explican que en la guerra entre PSOE y Podemos que se ha desatado en los últimos meses en algunos ayuntamientos y comunidades autónomas por la abstención de los socialistas en la investidura de Rajoy, ellos no deben aprovechar para desbancar al PSOE, sino por el momento mantenerse al margen y tratar de dar estabilidad a las instituciones. De ahí que vayan a tratar de aprobar los presupuestos de 2017 para Castilla-La Mancha con el PSOE de García-Page.