Trillo ha celebrado este sábado sus tradicionales Vacas por el Tajo, un evento taurino único por el entorno en el que se celebra y que en esta edición ha atraído a unas 8.000 personas al municipio, según han estimado los responsables de Protección Civil presentes en la localidad. Si bien es cierto que el número de visitantes es algo inferior al registrado en ediciones anteriores, también lo es que fueron muchos más los jóvenes que se atrevieron a disfrutar de la fiesta desde dentro del río debido al intenso calor, que alcanzó, en algunos momentos del día, los 39 grados. Al término del festejo, el parte de heridos asciende a siete personas, la mayoría por contusiones, golpes y torceduras leves, y entre ellos un mozo herido por asta de toro que tuvo que ser trasladado al Hospital Universitario de Guadalajara.
La jornada se desarrolló según lo esperado. La mayoría de visitantes comenzaron a llegar a primeras horas de la mañana, de forma escalonada, de modo que se llenó sólo uno de los dos aparcamientos habilitados ex profeso en las afueras del municipio, con el objetivo de no colapsar las calles ni obstaculizar las vías de evacuación ante posibles emergencias. Así, Protección Civil confirma que se desplazaron unos 3.000 vehículos y 12 autocares hasta Trillo. Las calles Jardines y Tajonada comenzaron a llenarse de aficionados que disfrutaron de toda la jornada a orillas del Tajo, que lució durante el día entero repleto de bañistas que no dudaron en refrescarse dado el intenso calor mientras aguardaban el inicio del evento taurino.
La escasez de agua, por un lado, y el intenso calor, por otro, fueron los principales motivos por los cuales esta edición ha sido más accidentada que otras. El bajo caudal del río beneficiaba la movilidad de las vacas, que realizaban arrancadas mucho más rápidas que en otras ocasiones. Los seis animales, tres de ellos adquiridos por el Ayuntamiento de Trillo al ganadero cifontino José Luis Ochaíta y el trío restante comprado a José María López, de Almoguera, por la Peña Taurina Vacas por el Tajo, ofrecieron mucho espectáculo en el agua, protagonizando numerosos chapuzones y varios cruces de una orilla a la otra del río, para disfrute de los espectadores.
El calor, por su parte, hizo que fueran muchos más los mozos y mozas que se lanzaran al ruedo fluvial, lo que multiplicaba también las probabilidades de heridos. Así, el parte médico al final del festejo deja un balance de un total de siete heridos, la mayoría por contusiones, golpes, torceduras y esguinces leves, y uno de ellos por asta de toro. En este último caso, se trata de un varón que recibió una cornada de unos 20 centímetros en el muslo y que tuvo que ser trasladado en UVI Móvil hasta el Hospital Universitario de Guadalajara, pero que no reviste gravedad, según explicaba el sargento del puesto de Trillo de la Guardia Civil, Alberto Casal.
En total, el dispositivo de seguridad contó con un grupo de la Guardia Civil GEAS (Grupo Especial de Actividades Subacuáticas) provisto de tres efectivos, una patrulla del Seprona, 15 efectivos de los puestos de Trillo y Cifuentes, 20 de la compañía de Molina de Aragón, 13 de Guadalajara (Servicio Cinológico dotado con dos perros), 20 efectivos de Protección Civil y cuatro vehículos Pengua, un equipo de la Cruz Roja, cuatro UVI móviles y dos quirófanos.
Desde el Ayuntamiento de Trillo agradecen la colaboración y el trabajo a todos los que formaron parte del mismo, velando por la seguridad del evento y haciendo posible su celebración en las mejores condiciones de orden. Asimismo, la concejala de Festejos, Marta Pérez, no quiere olvidarse de todos aquellos que han trabajado con ese mismo objetivo, entre ellos, los voluntarios de la Comisión de Festejos, numerosos socios de la Peña Taurina Vacas por el Tajo, así como los trabajadores municipales activos durante la jornada.