El portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular de las Cortes de Castilla-La Mancha, Francisco Núñez, ha denunciado hoy que el bipartido Page-Podemos ha permitido que 1.415 familias hayan sido desahuciadas en Castilla-La Mancha en el primer semestre de 2017.
Así se ha pronunciado Núñez en la rueda de prensa previa a la celebración de la comisión de Fomento, en la que ha indicado que estos datos suponen un 15 por ciento más de desalojos forzosos que en el año 20016, y un ritmo de crecimiento de 12 puntos por encima de la media nacional, según el informe elaborado por el Consejo General del Poder Judicial.
Unos datos que el parlamentario popular ha calificado de “alarmantes” y que produce “sonrojo” que un Gobierno socialista junto a un vicepresidente y una consejera de Podemos permitan que se produzcan estas cifras sin poner “el grito en el cielo”, ya que, son los que defienden una política anti-desahucio.
De esta manera, Núñez ha preguntado durante dicha comisión si el Gobierno de Page y Podemos tiene previsto retomar la política de vivienda de iniciativa público-privada para que a los constructores se les garantice el cobro de esas viviendas y si se van a pagar grandes cantidades de dinero a las que ya construyeron en la época socialista y que no se lograron vender.
“Tampoco sabemos si este Gobierno va a volver a la política de la especulación y del pelotazo urbanístico, porque todo apunta a que GICAMAN va encaminada en este sentido y muy lejos de lo que realmente necesitan los ciudadanos; una política pública, social y asequible para los que peor lo están pasando en la región”, ha indicado Núñez.
Núñez ha recordado que Page y Podemos rechazaron las enmiendas presentadas por el PP en los últimos presupuestos en las que se garantizaba el acceso a la vivienda a mujeres víctimas de violencia de género, personas mayores de 55 años sin empleo, jóvenes en paro y personas en riesgo de exclusión social.
El anterior Gobierno socialista dejó 580 millones de euros sin pagar a las empresas públicas de la región
Por otra parte, Francisco Núñez ha asegurado que el Gobierno socialista en la anterior legislatura dejó 580 millones de euros sin pagar a empresas públicas de la región, y fue Cospedal la que tuvo que hacer frente a esa deuda. También se ha referido a los 65 millones de euros que tuvo que pagar el Gobierno del PP en concepto de IVA de las obras públicas que también dejó sin abonar.
“Es muy bonito prometer que se van a construir carreteras, hospitales y parques públicos de viviendas, pero hay que pagarlo”, y por ello-ha continuado- “espero que el Gobierno de Page no vuelva a arruinar a Castilla-La Mancha y a dejar millones de deuda sin pagar como es el caso de GICAMAN”, ha señalado.
Núñez ha recordado algunas de las medidas en materia de vivienda que puso en marcha Cospedal como el alquiler con opción a compra, se bajó los precios de la venta y de alquiler, se firmaron acuerdos con el Instituto de la Mujer y la consejería de Sanidad para facilitar el uso de la vivienda a estos colectivos y se aplazaron el pago de las rentas de aquellas personas que debían varios meses de una vivienda social.
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