Guarinos responsabiliza al bipartido Page-Podemos de los perjuicios que están sufriendo los guadalajareños por el deterioro de la asistencia sanitaria, la educación y el bienestar social

“Si tuviéramos que definir lo que está siendo el gobierno de Page-Podemos para la provincia de Guadalajara, se podría resumir en marginación, fracaso, incumplimientos y engaño permanente a los guadalajareños, que tres años después seguimos esperando impacientemente que el jefe del Ejecutivo regional cumpla sus compromisos con esta provincia”.

Así lo ha asegurado la presidenta del Partido Popular y presidenta del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes regionales, Ana Guarinos, que ha hecho balance de lo que califica como el ‘desgobierno’ del bipartito y considera un “fracaso para las legítimas aspiraciones de Guadalajara”.

Muy contundente en sus afirmaciones, Guarinos tiene claro que la legislatura del gobierno socialcomunista ha estado marcada por el incumplimiento reiterado de los compromisos adquiridos, “Han sido tres años de anuncios y mentiras en los que la única prioridad de Page-Podemos ha sido mantener sus sillones y sus sueldos a costa del bienestar de los ciudadanos”, asegura.

La máxima responsable de los populares de Guadalajara ha hecho un repaso pormenorizado de las promesas que Page ha hecho en esta provincia, componiendo así una lista interminable de incumplimientos: ni está la ampliación del Hospital Universitario –aunque según Page las obras van ‘viento en popa’ desde hace tres años, aunque ese es el tiempo que llevan paradas-; ni está abierto el parking del centro hospitalario –cuando se ponga en marcha será el más caro de la ciudad-; ni está arreglado el Puente Árabe sobre el río Henares –que amenaza con derrumbarse sobre algún paseante-; ni se ha dado un solo paso para la construcción del Campus Universitario, “no sólo no está el Campus, sino que los universitarios de Guadalajara sólo reciben del Gobierno de Page dos euros, mientras que la financiación regional para el resto de universitarios de otras provincias de la región alcanza los cinco euros. Eso se llama marginación”, asegura la presidenta del PP.

Además, Guarinos ha recordado que tampoco está en marcha el Plan Estratégico del Corredor del Henares –anunciado hace más de 20 años por los sucesivos gobiernos socialistas, pero del que hasta la fecha sólo se conoce el nombre del coordinador nombrado por el dedo de Page-; ni se sabe nada de los planes para impulsar la Sierra Norte o el Señorío de Molina-Alto Tajo; ni está el instituto de Alovera –donde los alumnos de Secundaria han tenido que ser ubicados en los colegios-, nada se sabe tampoco del Centro de Salud de Cifuentes –donde la atención sanitaria se presta en barracones-; ni está el segundo Centro de Salud de Azuqueca, ni están rehabilitadas las naves del Fuerte de San Francisco –a pesar de dos sentencias que obligan a Page a ejecutar esas obras-…

“La realidad es que Page sólo ha venido a Guadalajara a hacer anuncios y a vender humo”, asegura Ana Guarinos, que lamenta profundamente las nefastas consecuencias que están teniendo las políticas del bipartito en esta provincia, a la que el gobierno Page-Podemos también está perjudicando con el incumplimiento del convenio sanitario con Madrid, “un acuerdo importantísimo, sellado por María Dolores Cospedal con la Comunidad de Madrid, que Page se ha cargado, obligando a enfermos y familiares a hacer turismo sanitario hasta Albacete, Ciudad Real o Toledo”.

Según afirma la presidenta del PP, “lo de Page con Guadalajara es la historia interminable de una marginación y abandono absolutos, que está lastrando las posibilidades de desarrollo de una provincia que, por su ubicación privilegiada, muy bien podría ser el motor de desarrollo de la Comunidad Autónoma”.

En la larga lista de despropósitos del Gobierno Page-Podemos, Guarinos incluye también el deterioro de la asistencia a las personas dependientes, o el abandono del campo –en Guadalajara hay una veintena de pueblos afectados por una plaga de conejos que Page se niega a reconocer-, y de las infraestructuras –Page no ha hecho ni un solo kilómetro de carreteras, y algunas están en estado tercermundista por falta de mantenimiento-, “por no hablar del estado deplorable de las instalaciones del Hospital Universitario, que están pidiendo a gritos una reforma”.

Para Guarinos, el balance de gestión de Page y sus socios de Gobierno, es tan sencillo como demoledor: “han traído el caos a la Sanidad, a la Educación y a la Dependencia, a las personas más vulnerables, se han cargado un convenio sanitario que era una garantía para los guadalajareños, han incrementado de forma alarmante las listas de espera para intervenciones quirúrgicas y se han olvidado de invertir en lo que esta provincia necesita”, asegura.

En su opinión, “la realidad es que Page sólo tiene dinero para el pago de privilegios, favores, sillones y asesores, olvidando por completo el bienestar de los ciudadanos, especialmente de los más vulnerables”, lamenta, asegurando que “Page es el peor presidente que ha tenido Castilla-La Mancha en general, y Guadalajara en particular, porque nunca antes un máximo responsable de esta región ha actuado con tanto sectarismo y tanto desprecio hacia esta provincia”.