La IV Marcha MTB no competitiva de Yebra volvió a ser la excusa perfecta para que decenas de aficionados a este deporte disfrutaran de la mañana del pasado domingo. Una cita marcada ya en rojo en el calendario yebrano, en la que de nuevo se mezcló a la perfección la práctica deportiva y la belleza de los campos alcarreños.
Pasaban las 9.30 horas cuando las piernas de los participantes se ponían en marcha, sucediendo una pedalada tras otra para ayudar a combatir el frío de la mañana. Cada ciclista pudo elegir entre dos rutas: Una de 50 kilómetros y otra de 30, ambas perfectamente señalizadas por la organización durante los días previos.
Los propios deportistas, llegados muchos de ellos de diferentes localidades de la provincia de Guadalajara y la Comunidad de Madrid, no dudaron en calificar el recorrido de “muy bonito, aunque un poco duro”. Así, tras ir terminando cada uno de ellos la prueba, fueron llegando a la meta situada en la plaza Mayor del pueblo. Allí les esperaba la Asociación Mujeres del 2000 de Yebra con su caldo caliente, sus bocadillos y sus bebidas, para ayudarles a recuperarse tras el esfuerzo realizado.
Justo después llegó el momento de sortear varios lotes de regalos, gracias a la cortesía de los distintos patrocinadores del evento. Además, el club más numeroso de la cita, el MTB Templarios de San Martín de la Vega, se llevó un jamón como premio.
Deporte y naturaleza
El alcalde, Juan Pedro Sánchez Yebra, destacaba que “siempre que organizamos un evento deportivo nos gusta poner también en valor el conjunto de nuestro municipio. La unión entre deporte y naturaleza es siempre garantía de éxito. Por eso nuestros participantes siempre se van encantados”.
“Gran parte de la responsabilidad de ese éxito es de los muchos colaboradores con los que contamos para la organización de este tipo de actividades, con los que nos sentimos profundamente agradecidos”, añadía el primer teniente alcalde y concejal de Deportes, Diego Barco.